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Como parte del Plan de Justicia para el Pueblo Yaqui, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural anunció el fortalecimiento del apoyo económico para la siembra de los cultivos estratégicos: trigo, alfalfa, frijol y cártamo para los pueblos yaquis, que les permitirá adquirir semilla, fertilizantes e insumos de sanidad y, de esta forma, aumentar la productividad y abonar a la seguridad alimentaria del país. 

En gira de trabajo por Pótam, Guaymas, Sonora, el titular de Agricultura, Víctor Villalobos Arámbula, hizo un reconocimiento a los agricultores yaquis, quienes en el ciclo agrícola pasado sembraron dos mil 660 hectáreas de trigo y, con base en los resultados de las cosechas en el ciclo primavera-verano, alcanzaron una producción estimada de más de 14 mil toneladas.

El servidor público federal, junto con la directora de Cultivos Básicos y Oleaginosas de la dependencia, Mirna Aragón Sánchez –designada por Agricultura para atender el Plan de Justicia para el Pueblo Yaqui—, presentaron los avances del Proyecto Estratégico de Desarrollo Territorial Agrícola, Ganadero, Acuícola y Pesquero 2022, propuesto por las autoridades tradicionales de estos pueblos al presidente Andrés Manuel López Obrador, en su antepasada visita a Tórim. 

Villalobos Arámbula indicó que para el ciclo otoño-invierno 2022-2023 aumentará el apoyo de seis mil pesos por hectárea a siete mil pesos y hasta 20 hectáreas por productor, y pueden optar por el apoyo para trigo y alfalfa, mientras que para frijol y cártamo el apoyo será de tres mil 100 pesos por hectárea. 

Resaltó que, en atención a la petición presentada al presidente de la República, se entregó un apoyo de tres mil cien pesos por hectárea para la siembra de ajonjolí, por hasta 20 hectáreas por productor, el cual ya se está cosechando por primera vez después de 30 años, con buenas expectativas de producción y una productividad histórica de más de 1.2 toneladas por hectárea y una rentabilidad superior a 22 por ciento, mientras recuperan la capacidad productiva y autonomía de su territorio y sin rentar la tierra. 

Señaló que también se proporcionaron las centrales de maquinaria para cada pueblo, lo que permitió sacar adelante el ciclo de cosecha otoño-invierno 2021-2022, el de primavera-verano 2022 y contribuirá de nueva cuenta a sacar adelante sus cosechas venideras con equipo acorde con sus necesidades. 

Para este fin, abundó el secretario Villalobos, se apoyarán también los cobertizos en este año, que permitirán el buen resguardo de su maquinaria y equipo y, de esta forma, extender su vida productiva. 

El titular de Agricultura puntualizó que en el caso de los módulos de maquinaria agrícola (tractores, trilladoras y cobertizos, entre otros), se trabaja una propuesta para que en 2023 se lleve a cabo la segunda dotación de centrales de maquinaria, sujeto a suficiencia presupuestal. 

Sobre el establecimiento de ocho Módulos de Producción de Biofertilizantes, el secretario comentó que el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) brindará la capacitación necesaria para la elaboración de estos bio-insumos, de la mano con la Estrategia Nacional de Suelos para la Agricultura Sustentable (Enasas). 

Adicionalmente, apuntó que en el establecimiento de 250 hectáreas de praderas se instalarán tres parcelas de nopal forrajero sin espinas, por parte de la Comisión Nacional de Zonas Áridas (Conaza), como lotes semilleros para su posterior propagación masiva, así como semilla de pasto Banderita por parte del Colegio de Postgraduados (Colpos), que es ideal para zonas áridas y semiáridas. 

Villalobos Arámbula enfatizó que la Secretaría de Agricultura ha hecho todo lo necesario para que los pueblos yaquis recuperen su autonomía y capacidad productiva, en el marco del llamado del presidente de la República para alcanzar la seguridad alimentaria y en un marco en el que son actores clave en la producción de trigo, como parte del Plan de Justicia para el Pueblo Yaqui. 

El encargado de la Coordinación General de Agricultura, Santiago Argüello Campos, precisó que se espera la inscripción de más de dos mil 600 hectáreas en trigo y se logren, junto con la asistencia técnica, rendimientos excepcionales. 

El titular del INIFAP, Luis Ángel Rodríguez del Bosque, informó los avances de los cultivos con asistencia técnica del organismo a su cargo que, en coordinación con el gobierno del estado de Sonora y financiamiento de la Banca de Desarrollo FND/FIRA, continuará el presente año y en el siguiente 2023. 

De esta manera, el secretario Villalobos Arámbula y el coordinador Argüello Campos, de la mano de los gobernadores de los ocho pueblos yaquis, hicieron entrega de los apoyos para la siembra de trigo otoño-invierno 2022-2023 a productores y productoras. 

Adicionalmente, motivaron a los productores a crear un concurso y premiación a quien logre el mejor rendimiento de trigo en la siembra y cosecha venidera. 

En representación del coordinador general de Ganadería, Arturo Macosay Córdova, el director de la Comisión Técnico Consultiva de Coeficientes de Agostadero (Cotecoca), Dan Bolaños López, expuso que en el Proyecto Estratégico para el Manejo Integral de Transferencia de Tecnología del Hato Caprino están autorizados ocho termos para el almacenamiento de pajillas de semen, uno por pueblo, y con esto podrán integrar el concepto de Banco de Semen. 

Agregó que también se autorizaron dos médicos para que apliquen la metodología de trabajo del INIFAP, que es el de Grupo Ganadero de Variación y Transferencia de Tecnología (GGAVAT). 

El servidor público de Agricultura destacó el apoyo por paquete que será para medicamentos o vitaminas y bebederos, comederos, de 14 mil 250 pesos por paquete y por hasta 400 de estas unidades. 

Respecto a la adquisición de sementales bovinos y caprinos, Bolaños dijo que están autorizados 150 sementales bovinos de registro con el seguro de vida incluido por un año y 190 sementales caprinos de registro, con su seguro de vida incluido por un año. 

En la jornada de trabajo también participaron autoridades de Agricultura, de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca), de la Financiera Nacional de Desarrollo (FND), de Fideicomisos Instituidos en Relación a la Agricultura (FIRA), del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) y del gobierno del estado de Sonora, entre otros.