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Ayer se apersonó la plana militar de la terminal aérea Felipe Ángeles (AIFA), al mando de René Trujillo, con toda la comunidad aeronáutica que trabaja en México: más de 20 compañías, aerolíneas comerciales, cargueras y prestadores de servicios, se dieron cita en SEDENA para conocer de viva voz la voluntad oficial para trabajar coordinadamente y de manera segura con el sector privado y conocer a detalle los requerimientos de las aerolíneas que voluntariamente -por ahora- deseen tener vuelos en el polígono de Santa Lucía.

En el ambiente de la reunión flotaban las declaraciones del líder del sindicato de controladores aéreos, José Alfredo Covarrubias, quien en la víspera aseguró hubo un evento peligroso en la aproximación al AICM de un avión de Volaris y otro de Aeroméxico por la complicación de las nuevas coordenadas de operación diseñadas por NavBlue para abrir el espacio aéreo para los vuelos en Santa Lucía; un evento del que por ahora no existe reporte ni registro oficial y que fue negado por ambas aerolíneas. Claro, para todos los convidados es sabida la tremenda grilla existente entre el sindicato de controladores y el director del Servicio de Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano, Víctor Hernández, quien se caracteriza por su constante enfrentamiento con esos trabajadores que reclaman mejores condiciones de trabajo.

Nos dicen que, por su parte, los directivos del Felipe Ángeles mostraron un modelo de trabajo ordenado y sistemático -muy propio de las fuerzas armadas- en donde las áreas de operación a cargo de Manuel García y las administrativas encomendadas a Isidoro Pastor buscan cumplir con un muy apretado calendario de obras, pruebas y mejora en sólo un año.

Y se supo que en ese ambiente abierto los agremiados a CANAERO que lleva Luis Noriega y de IATA -que lidera Robin Hayes– se mostraron receptivos al plan, y se dejó abierta la puerta a resolver dudas tan relevantes como las mediciones del nuevo espacio aéreo del Valle de México y la interactuación de 5 aeropuertos, certificaciones internacionales, conectividad terrestre y servicios; que los representantes de VivaAerobus, a cargo de Juan Carlos Zuazua, fueron los más entusiastas clientes futuros para Santa Lucía… y que los ausentes fueron los representantes de Alejandro del Valle pues Interjet está mas extinta que un mamut.

El tiempo corre y los aviones vuelan.

Aguas con el hambre

En sólo un año el precio del maíz amarillo se disparó en 78.6% y el blanco anda en nivel similares, conforma el Grupo Consultor de Mercados Agrícola que conduce Juan Carlos Anaya. La causa es simple y tremenda: la sequía que afecta a buena parte del conteniente americano y una demanda que se fortalece al reabrirse las actividades económicas, así como una notable caída en la producción y productividad en México. Ello también afecta a otros granos oleaginosos, como el frijol cuyo volumen de importación se elevó 107% y que dada la reducción de su área cultivables por la sequía la Secretaría de Economía, de Tatiana Clouthier prepara ampliar el cupo de importación en otras 70 mil toneladas de frijol negro libre de arancel. La caída de producción nacional de ambos granos puede estar afectada entre -15% y -20% este año, lo que elevará los precios al consumidor considerando que las importaciones también se encarecen. Es momento en que además de CONAGUA, a cargo Blanca Jiménez, otras instancias de gobierno metan la mano para evitar una crisis alimenticia este año.

Banorte, emisión cero

Si, un grupo financiero tiene emisiones de CO2: solamente por el consumo de electricidad 24x7x360 para la operación de sus sistemas de información, la energía proveniente de fuentes fósiles tiene un notable impacto ambiental. Ya no digamos el financiamiento a empresas con alto impacto ambientel, Por ello es resulta especialmente importante la decisión del grupo encabezado por Carlos Hank González para firmar el Net Zero Banking Alliace de la ONU para descarbonizar totalmente sus carteras de crédito e inversión para 2050. Sustentabilidad, la apuesta de Banorte.

mflores37@yahoo.es

@mfloresarellano