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El de ayer fue sin duda el día de los dilemas en el terreno político y esto, de alguna manera, le imprime incertidumbre al de por sí revuelto ambiente nacional, pero hay que ir por partes para tratar de comprender esto que ya pinta para un caos.

Por un lado, en el Senado de la República, el presidente de la Junta de Coordinación Política, Ricardo Monreal Avila, marcó la pauta para la esperada ruptura entre él y Morena. Lo hace porque sabe el peso que tiene; que de irse, no lo haría solo porque ha logrado conformar un importante capital político.

El motivo de lo anterior es porque el legislador por Zacatecas tuvo la osadía de frenar el “fast-track” con el que en la Cámara de Diputados se aprobó, mediante “chicanas”, la incorporación de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional. En la Cámara Alta, se seguirá el proceso legal que corresponde a toda iniciativa, esto es, pasará por Comisiones y, de acuerdo a cálculos del propio senador Monreal Avila, por ahí del viernes o sábado, para poder dar el tiempo que requieran las comisiones para deliberar en torno a la minuta.

El que el presidente de la Jucopo en el Senado siga los lineamientos que dicta el reglamento de la Cámara Alta, representa una afrenta ni más ni menos que al presidente Andrés Manuel López Obrador, que supone que los integrantes tanto del Poder Legislativo como del Judicial, son sus empleados y les puede “tirar línea”, amenazarlos, insultarlos y regañarlos si no se cumplen sus designios. Esto, porque desde que la controvertida iniciativa llegó al Senado de la República, el senador Monreal dio total libertad a los integrantes de la fracción parlamentaria de Morena para que voten conforme ellos mismos lo decidan.

Específicamente y en términos beisboleros, -para no olvidar a un clásico-, el legislador zacatecano señaló que sus coordinados, “Tendrán bateo libre, que cada uno asuma su responsabilidad y vote en conciencia».

Claro que los senadores morenistas perteneciente a los llamados duros, se inclinan aún ahora, porque la iniciativa sobre la Guardia Nacional, siga exactamente el mismo camino que siguió en el Palacio Legislativo de San Lázaro, es decir, que se le dispensen todos los trámites y se apruebe sobre las rodillas y ahí entrarán de nuevo las habilidades negociadoras de Monreal.

Por eso diversos analistas coinciden en señalar que ya no tarda mucho tiempo en darse la ruptura finalmente Monreal y el inquilino de Palacio Nacional porque estamos en plena cuenta regresiva.

Para rematar y en lo que representa un golpe maestro por parte del zacatecano al tabasqueño, el primero, señaló de manera textual: “Hay inquietudes, les quiero decir a todas las asociaciones civiles, sociedad, civil, grupo de personas, que los escucharemos, el Senado abrirá sus puertas para escucharlos y no tenemos ningún problema para poder dialogar, esa es nuestra esencia y eso debemos hacer”. Una especie de parlamento abierto que le cayó a López Obrador, como un balde de agua, todavía más helada que cuando el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, sentenció que las investigaciones en torno a Pío López Obrador continúen.

El problema es que esta iniciativa, ha terminado por dividir al PRI, lo que coloca a este partido en una situación muy riesgosa, sobre todo de cara a las elecciones del año entrante en Coahuila y el Estado de México.

La alianza “Va por México”, podría estar tambaleándose y las amenazas ya empezaron cuando el líder del PAN, Marko Cortés, advirtió que si el Revolucionario Institucional respalda la reforma sobre la Guardia Nacional y amplía el periodo de actuación de las Fuerzas Armadas en labores de seguridad hasta el 2028 como proponen los priístas en la Cámara de Diputados, entonces, dicha alianza podría romperse definitivamente.

Una recomendación no sobra: que el bloque opositor no debería de hacerle el juego a López Obrador, que tiene ahora como objetivo precisamente, romper esta alianza  y así no tener obstáculo para que Morena vuelva a ganar las elecciones en el 2024.

Por sus rede sociales, al líder nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, de alguna manera le respondió a Cortés a la voz de que “el PRI no recibe ultimátum, ni acepta órdenes ni de aliados ni de adversarios. Siempre vamos a construir en unidad y convicción por el bien de México” e informó que hoy a las diez de la mañana, el PRI presentará su postura.

MUNICIONES

*** El presidente López Obrador supone que acogiéndose a aquel refrán que dice: “es de sabios cambiar de opinión”, ya se va a “lavar las manos” en cuanto a que cambió de parecer sobre el tema de que esté militarizando al país y el Ejército continúe en el combate a la inseguridad. Si el de Tepetitán no ha podido revertir este gravísimo problema, el del combate a la inseguridad, los años de su errada administración siguen pasando y no deja de hablar de que los conservadores le heredaron un gran problema con el que definitivamente, no puede.  “La paz es fruto de la justicia y eso es la base de la política de seguridad”, dijo López Obrador en su gustadísimo “stand-up” mañanero y no ha podido conseguir ni una, ni otra cosa. Vale la pena recordar que antes, y si al pasado vamos, muchos integrantes de esta errada y llamada cuarta transformación renegaron abiertamente de la presencia de los militares en las calles y lo manifestaban por las “exbenditas redes sociales” con ese lenguaje tan “florido” y vulgar que los caracteriza. Ahí está el ejemplo del controvertido diputado petista, Gerardo Fernández Noroña, que ahora cuando su jefe cambió de opinión, tiene arengas como: “¡Larga vida a las Fuerzas Armadas sirviendo al pueblo de México!”.

*** No, pues ya perdió todo encanto el gustadísimo show “cómico, mágico y musical” denominado el Martes del Jaguar, de la gobernadora de Campeche, Layda Sansores, -que todo hace, menos gobernar-, porque decidió no hablar de su archienemigo favorito, Alejandro Moreno, en tanto no se resuelva el amparo que interpuso el dirigente priísta. Y ahora, ¿qué va a hacer la mandataria estatal; cantará, bailará?, o, ¿acaso pondrá a hacer “stand-up” a su patiño favorito, el fiscal estatal, Renato Sales Heredia?, porque de alguna otra cosa importante que tenga que informar sobre lo que está haciendo en su estado, nada más, nada.

*** Pues nada, que la exsecretaria de Educación Púbica, Delfina Gómez, regresó a su escaño al Senado de la República, ¿acaso necesitará el fuero? El caso es que la señora Gómez Alvarez, utilizará esta posición para promocionarse en su afán de llegar a la guberantura del Estado de México.

morcora@gmail.com