Ley Bonilla, AMLO “le mide el agua a los tamales”
Aunque el presidente Andrés López Obrador prometió que hoy llevará a Palacio Nacional a un Notario Público para que dé fe respecto a que no tiene intención alguna de reelegirse, nadie o casi nadie podría poner en duda que lo sucedido en Baja California con la ya muy conocida Ley Bonilla, es un ensayo que el tabasqueño lanzó para “medirle el agua a los tamales” y en el 2024 hacer el intento de repetir en la boleta electoral, sobre todo ahora que sus seguidores y el “pueblo sabio y bueno”, como que le andan fallando y para cualquier duda, ahí están los índices de popularidad que consistentemente siguen bajando.
Hubo otro ensayo previo del tabasqueño, hacia finales del pasado mes de marzo, cuando también y para variar, se dijo muy indignado porque sus enemigos se dedicaban a descalificarlo y entonces le dio por firmar una carta compromiso en la que se comprometió a no reelegirse en el 2024 porque según él, es partidario del principio de “sufragio efectivo, no reelección”
En aquella ocasión les respondió a la voz de que: “Mis adversarios políticos, los conservadores, que creen que soy como ellos porque su verdadera doctrina es la hipocresía. Vociferan que la propuesta de la revocación de mandato encubre la intención de reelegirme en 2024”. Agregó además que un sexenio sí le era suficiente para erradicar la corrupción, la impunidad “y convertir a México en una República próspera, democrática, justa y fraterna”, (¡¡Ajá, sí, cómo de que no!!).
Lo cierto es que el tiempo ha transcurrido y recientemente, el presidente instruyó a los coordinadores de su partido en el Congreso de la Unión, Ricardo Monreal y Mario Delgado, a que tenían que sacar al precio que fuera precisamente, la revocación de mandato. Poco después, resulta que la carta compromiso firmada hace cuatro meses, su siempre maravilloso y eficiente equipo la había perdido.
Luego, con la posición que asumió el tabasqueño en torno al “regalo” que en breve podría recibir su muy amigo Bonilla, solo consiguió terminar de avivar los comentarios en torno a su tan acariciado anhelo reeleccionista al calificar de hipócritas a quienes se han manifestado en contra de la Ley Bonilla. Además, ¿cómo está eso de que López Obrador dice que él no se mete en asuntos locales? Ya nada más falta que le dé un premio al diputado local Víctor Morán, que fue quien promovió esta aberración a todas luces inconstitucional.
Ya se comentaba en este espacio en anterior entrega, que Morán es todo un personaje en Baja California que tiene varios señalamientos en su contra porque presuntamente ha hecho gastos importantes como miembro del Congreso local siempre beneficiándose y se dice que él solito se dio a la tarea de convencer a los legisladores locales de oposición para que votaran a favor de la ampliación del mandato de Bonilla. Es más, trascendió que cada diputado bajacaliforniano habría recibido algo así como un millón de dólares por cabeza. ¿Será?
Y para “cerrar con broche de oro”, como la actual Legislatura local termina funciones este ya próximo 31 de julio, corresponderá entonces al presidente de la XXIII Legislatura, que entra en funciones el 1 de agosto, publicar la arbitraria modificación que el gobernador Francisco “Kiko” Vega, se ha resistido a publicar en el Diario Oficial del estado, así que a lo mejor valdría la pena que la publicara bajo protesta, para que entonces procedan todas los recursos de inconformidad.
En todo este relajo, no cabe duda que después de Jaime Bonilla, Morán ha tenido un papel importante y digamos, negociador porque desde luego que resulta beneficiado. Ya hubiera querido desempeñar ese rol el doctor en derecho, Amador Rodríguez Lozano, futuro secretario de Gobierno que hizo infructuosos intentos por defender la Ley Bonilla.
Y en lo que es otra sorpresa Víctor Morán, en una abierta acción de reelección que niega bajo el argumento de que como solicitó licencia, valiéndose de artimañas volvió a postularse como candidato a diputado local por Morena y ganó, pero eso sí, en este caso, Morán asegura que “cada quien quiere llevar agua para su molino”, se nota que él también.
Por su parte, en diversas entrevistas, Bonilla dijo que él es un demócrata y está dispuesto a aceptar el fallo que dé la Suprema Corte de Justicia de la Nación en torno a este espinoso asunto.
Aquí, seguramente el gobernador electo sabe que cuando los alcaldes de Mexicali, Gustavo Sánchez y de Tijuana interpusieron en la SCJN recurso de inconstitucionalidad, mismo que recibieron los ministros Yazmín Ezquivel Mosa y Juan Luis Alcántara Carrancá, los dos ministros nombramos por López Obrador y sus incondicionales que desde luego, de inmediato la rechazaron por “notoriamente improcedente”
Ante los reclamos de sus correligionarios de Morena, como por ejemplo, la diputada Tatiana Clouthier, de que no acepte la ampliación del período el gobernador electo, en el colmo de la desfachatez, asegura que ha visto declaraciones públicas en tal sentido, “porque el asunto se ha litigado en los medios” y agrega que él no tiene ninguna llamada o acercamiento por parte de los legisladores federales.
“Yo voy a aceptar y a acatar la instrucción de la Suprema Corte de Justicia porque soy muy respetuoso de las instituciones, ¿quién soy yo para no acatarlo?, todos somos parte de un sistema y de una Constitución”.
MUNICIONES
*** De acuerdo con cifras del Comité de las Naciones Unidas para la Eliminación de la discriminación contra las Mujeres y del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, el municipio de Los Reyes La Paz tiene la tasa más alta de asesinatos de mujeres en hechos de violencia extrema en el país, robos a transeúntes y a casa habitación y se encuentra entre las zonas más afectadas por prácticas como el cobro del derecho de piso por parte de grupos delincuenciales. Por lo anterior, el gobierno del Estado de México, que lleva Alfredo del Mazo, tiene claro que es urgente redoblar los esfuerzos para atender las problemáticas que se presentan en la zona e invitar al cumplimiento de esa tarea tanto al sector empresarial como a la sociedad civil; esto, a través de proyectos enfocados a que los jóvenes de esa localidad se involucren en actividades productivas para modificar su entorno.
*** El próximo sábado, el presidente se reunirá con su homólogo hondureño, Juan Gonzalo Hernández y ya muchos se preguntan: ¿cuánto dinero le irá a regalar el tabasqueño?, porque no cabe duda que AMLO es “candil de la calle, oscuridad en su casa”. ¡Qué tal!