Desde COPARMEX, reafirmamos nuestro compromiso con las y los trabajadores de México. Sabemos que cuando se mejoran las condiciones laborales, también se benefician sus familias, por ello seguiremos impulsando un entorno laboral más justo, inclusivo y competitivo, con empleos dignos, respeto a los derechos fundamentales y oportunidades de desarrollo para todos.
Además, reconocemos que las micro, pequeñas y medianas empresas son el corazón de la economía nacional y el principal motor de empleo formal en el país. Por ello, seguiremos impulsando políticas que favorecen su desarrollo, productividad e inclusión en las cadenas de valor. Fortalecer a los pequeños negocios es indispensable para cerrar brechas, generar bienestar en las comunidades y consolidar un entorno laboral más justo, especialmente en las regiones con mayor rezago.
Continuaremos promoviendo el aumento del salario mínimo para que alcance la línea de bienestar familiar, así como políticas públicas que impulsan la productividad, la transición hacia la formalidad —como la deducibilidad al 100% de las prestaciones laborales— y la revisión del subsidio al empleo (tabla del Impuesto Sobre la Renta).
Estamos convencidos de que el diálogo social tripartito es el camino más eficaz para afrontar los grandes retos del presente y del futuro del trabajo: desde la digitalización y la transición energética, hasta la inclusión laboral de las mujeres y la eliminación de la informalidad. Solo mediante acuerdos construidos con responsabilidad, visión y corresponsabilidad entre trabajadores, trabajadores y gobierno, podremos diseñar condiciones laborales modernas que impulsen la innovación, protejan los derechos y generen bienestar social.
Convocamos a todos los actores del mundo laboral a seguir colaborando con firmeza y altura de miras. Es momento de forjar, desde el diálogo y la unidad, un México más justo, próspero e incluyente.