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Pareciera ser un lugar común señalar que Movimiento Ciudadano nunca ha dejado de ser el “patiño” de Morena con todo y rémoras, y esto no es solo por el gran parecido que tienen los logos de ambos institutos políticos; esto es algo que va mucho más allá y que guarda connotaciones políticas importantes.

El flamante y cuestionado dirigente del partido naranja, Jorge Alvarez Maynez ha terminado a llevar a este instituto político por ese triste y patético camino, pero está visto que el excandidato presidencial que brinda con cerveza en los estadios, se ha vuelto un personaje muy menor; sigue en su calidad de títere porque definitivamente no puede con su partido; es algo muy simple, no tiene la capacidad.

Desde que en el Rancho Izaguirre, en Teuchitlán, Jalisco quedó al descubierto los horrores y matanzas que ahí se practicaban, Movimiento Ciudadano se convirtió todavía más en rehén de Morena. El exgobernador de dicho estado, Enrique Alfaro, sigue muy quitado de la pena estudiando en Madrid para convertirse en director técnico de futbol; nada parece tocarlo, mientras que al actual jefe del Ejecutivo local, Pablo Lemus, suda la “gota gorda” porque un nuevo problema surgió ahorra con el concierto de los “Alegres del Barranco” en el auditorio Telmex, haciendo homenajes a los narcotraficantes Joaquín Guzmán Loera, pero principalmente al Mencho… líder del Cartel Jalisco Nueva Generación, (CJNG).

Pues en base a lo anterior, en la Cámara de Diputados, la fracción parlamentaria que coordina Ivonne Ortega, hizo patente que están al servicio total y absoluto del oficialismo y en esta ocasión, los naranjas votaron a favor de desaparecer Compranet, lo que ha derivado en que Morena tenga el control absoluto de las compras del gobierno para beneficiar a los amigos de esta errada y llamada cuarta transformación, ahora en su segundo piso y colocar en total opacidad éstas.

De nada vale que los de MC pudieran alegar que Morena los tienen bien agarrados por la situación que se vive en Jalisco; hay que ser congruentes y en el partido naranja eso, ni lo conocen

Y el PRI, cuyo coordinador en San Lázaro es Rubén Moreira, fue el encargado de poner al descubierto esta situación y valió la pena, porque con eso de que en el caso Cuauhtémoc Blanco se habló en los corrillos parlamentarios de que se había reactivado de nuevo la alianza PRIMOR en lo que debería ser más bien, la alianza MORMOC, ¿o no?

No solo empresarios como el presidente de Grupo Salinas, Ricardo Salinas Pliego, han destacado que lo que se aprobó gracias a la, digamos, fusión MORMOC, “exenta a las Fuerzas Armadas y a las empresas estatales e cumplir con las reglas de transparencia. Es una iniciativa hecha para robar dinero público”.

MUNICIONES

*** “Acá estamos libres, ya lo dije de manera clara, no se me hagan bolas, pa’ tras ni para agarrar vuelo”. Esto lo dijo ni más ni menos que el hoy flamante senador de Morena, Alejandro Murat, cuando le preguntaron si él, como Miguel Angel Yunes, como apestado y traidor que es, se iría del partido guinda. No, el exgobernador de Oaxaca está muy a gusto bajo el cobijo de sus nuevos correligionarios, que no está de más subrayar, no lo quieren y les molestan mucho los premios que la mismísima presidenta Claudia Sheinbaum les otorga por los favores recibidos. Ante esto, los morenistas puros, no han dejado de reclamar que su trayectoria no les es reconocida, así que Murat Hinojosa no debería de estar tan confiado, ya lo dice el sabio refrán: “del plato a la boca, se puede caer la sopa”.

*** Y sobre este mismo tema, el presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, Ricardo Monreal, celebró y está muy contento de que Miguel Angel Yunes retirara su solicitud de afiliación a Morena y que lo hubiera hecho para evitar conflictos internos en el partido guinda; pero hay que reparar que muchos son los estiras y aflojes internos que vive este instituto político. Reconoció que “Miguel Ángel Yunes aportó una importante acción en la reforma judicial y en otras reformas, es muy sencillo, si él no hubiese actuado por convicción, no hubiera habido reforma judicial, por eso le tengo respeto a él y a su familia”. No, el senador Yunes no actuó por convicción, eso lo dijo su padre, Yunes Linares cuando en el Senado defendió a su retoño. El ahora expanista actuó porque le llegaron al precio y lo amenazaron con sacarle abultado expediente.

morcora@gmail.com