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Tissot ofrece una mirada íntima a la vida de Enea Bastianini en su última campaña para el primer reloj esqueletado T-Race MotoGPTM Automatic Chronograph en una edición limitada, en la que nos transmite las experiencias determinantes que lo han convertido en el piloto y la persona que es hoy. La campaña muestra los momentos decisivos que han llevado a Enea a superarse a sí mismo constantemente, con el cronógrafo automático T-Race MotoGPTM en el corazón de esta andadura, cuyo diseño encarna la precisión y la resiliencia que han marcado la trayectoria del piloto. 

Nacido para ganar

Enea nos transporta a sus raíces y a su infancia, donde los recuerdos de una energía intrépida siguen motivándolo. De pie ante el mismo circuito en el que entrenaba de niño, ahora repleto de jóvenes aspirantes a pilotos, reflexiona sobre cómo esta pista se ha convertido en su hogar. Sin embargo, fue en el seno de su familia donde se sentaron las bases de los valores que aún lo guían hoy en día, profundamente en consonancia con los de Tissot. En su familia encuentra fortaleza, plenamente consciente de que, sobre la moto, se transforma en una bestia impulsada por su fuerza interior. 

Reflexionando sobre su trayectoria, nos recuerda que la grandeza no consiste solo en la velocidad, sino en los saltos de fe que damos y en la confianza que depositamos en nosotros mismos. El video refuerza el vínculo entre Enea y Tissot, al tiempo que desvela las aspiraciones comunes de superarse constantemente. A través de esta campaña, Tissot pone de relieve la mentalidad que impulsa a Enea a superar los retos. Recorriendo, curva tras curva, el mismo circuito de motocross en Italia en el que se entrenaba de niño, la pista simboliza las dificultades a las que se enfrenta en la vida. La campaña, en la que se ve saltando y elevándose sobre la pista, subraya la importancia de ser capaz de ver más allá de los obstáculos inmediatos, porque el verdadero progreso se logra dando un paso atrás, adquiriendo perspectiva y lanzándose a lo desconocido. Su asociación con Tissot refleja esta filosofía y cada riesgo se evidencia en el modelo esqueletado T-Race Auto MotoGPTM Cronógrafo Automático en edición limitada. Al igual que Enea desafía las limitaciones en la pista, el reloj se convierte en un símbolo; su diseño esqueletado deja al descubierto la artesanía que encierra, como la experiencia que revela la fuerza interior.