El Senado de la República conmemoró el Día del Maestro con una ceremonia solemne en la que inscribieron, en letras doradas y en el Muro de Honor, la leyenda: “A las y los maestros de México, por su contribución al desarrollo del país”.
Desde tribuna, el senador Alfonso Cepeda Salas, proponente de la inscripción, sostuvo que las y los maestros son ejemplo de “entrega sin límite” a la labor docente durante mucho tiempo, pues gracias a ellos se ha “construido el sistema educativo nacional”, por lo que reconocerlos en el Muro de Honor del Senado es un acto de “justicia, gratitud y reivindicación”.
En representación de la secretaría de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez Velázquez, el subsecretario de Gobernación, César Alejandro Yáñez Centeno Cabrera, leyó un texto escrito por el titular de la política interior en el que sostiene que este homenaje honra la “enorme” contribución que hacen todos los días maestras y maestros en el país.
César Yáñez aseguró que México no sería lo que es sin las y los maestros, ni podrá ser “lo que se sueña sin su guía”, por lo que este reconocimiento sirve para recordar que el futuro se inscribe en un aula y que cada vez que un maestro o una maestra enseñan o inspiran, el país entero avanza.
Con la presencia del presidente de la Junta de Coordinación Política, Adán Augusto López Hernández, y en representación de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, el secretario de Educación Pública, Mario Delgado Carrillo, aseveró que las y los maestros son arquitectos del “alma nacional”, pues la revolución de las conciencias comenzó hace décadas en las aulas gracias al magisterio.
Delgado Carrillo recordó que el magisterio ha sido el reservorio más profundo de la conciencia nacional, y, por ello, se terminó la “persecución por la basificación”, donde casi un millón de maestras y maestros han sido basificados, de tal manera que hoy se reafirma la política de recuperación salarial, al incrementar con un nueve por ciento las percepciones, tal y como lo anunció la presidenta Sheinbaum Pardo.
El maestro normalista José Guadalupe Montaño Villalobos, en representación del magisterio, señaló que es una satisfacción que se inscribe en el Muro de Honor una leyenda que enaltece al magisterio nacional, por lo que las letras doradas inscritas son un hecho histórico y un homenaje a la noble labor que las y los maestros interpretan por las niñas y niños del país.
Montaño Villalobos externó que es importante dignificar la profesión magisterial y, por ello, es un acierto enaltecer a las y los maestros con esta ceremonia solemne, pero no sólo eso, también representa una reflexión y una oportunidad sobre los avances que se han obtenido en la lucha reivindicativa a través del diálogo y acuerdos que benefician a todo el magisterio en la república.
Finalmente, el presidente de la Comisión de Seguridad Social, Alfonso Cepeda Salas, añadió que las letras doradas dan cuenta de que el Estado mexicano, las entidades federativas y el pueblo de México “valoran el trabajo y las aportaciones del magisterio a la nación”, pues ellas y ellos construyen la historia y son artífices de las transformaciones del país.