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Esta mañana se llevó a cabo el foro virtual “Impuestos Saludables para mitigar la mortalidad por COVID-19”, los participantes consideraron que los impuestos saludables son viables en este momento además de ser necesarios para mitigar los impactos negativos que el virus SARS-CoV-2 está provocando en la población.


En su intervención el diputado del PT, Manuel Huerta, secretario de la Comisión de Salud señaló, “Considero impostergable que desde el Poder Legislativo debemos inyectarle a nuestro sector Salud recursos humanos, económicos y materiales. No planteo nuevos impuestos. Se trata de actualizar los valores de los que ya existen. Y veo en los Impuestos Saludables la vía para ello.


El diputado poblano Manuel Huerta explicó que el 23 de septiembre, presentó una iniciativa que reforma el artículo segundo de la Ley del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) en materia de cigarros de tabaco. Hicimos un estudio que nos permitió plantear gravar con 1 peso con 49 centavos cada cigarro. Esto representa un ajuste de 29 pesos por cajetilla de 20 cigarros.


Según datos del subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio González, durante 2020 luego de la indexación al precio de los cigarros que se alcanzó en la discusión de 2019, se han recaudado cerca de 43 mil millones derivados de este impuesto, pero los costos asociados al consumo de tabaco rondan los 75 mil millones de pesos. Esto significa que el gobierno federal aún tiene un déficit de por lo menos 32 mil millones de pesos.


Adicionalmente Huerta Martínez comentó que hace unos días presentó otra iniciativa para platear que en el apartado de IEPS se ajuste a 2 pesos con 50 centavos por litro el precio de las bebidas saborizadas y lo recaudado (que podría estar en el orden de 40 mil millones de pesos), se destine al Insabi en fomento de las acciones que el Estado Mexicano implemente para combatir la obesidad y sobrepeso de las niñas, niños y adolescentes en nuestro país.


Por su parte la Doctora Arantxa Colchero, Especialista en Economía de la Salud e investigadora del Instituto Nacional de Salud Pública detalló que de acuerdo con estudios realizados la prevalencia de obesidad y diabetes en México es de 70 por ciento en adultos y 33 por ciento en niños. Mientras que la prevalencia de diabetes es de 14 por ciento, lo que representa una carga importante para el sistema de Salud de alrededor de 4.8 mil millones de dólares.


Colchero destacó que desde enero del 2014 el consumidor paga 1 peso por litro en la compra de bebidas azucaradas. Lo cual ha derivado en una disminución en el consumo de 6.7%, con base en la encuesta de Panel de Hogares 2012-2015 Urbanos, con lo cual se demuestra que al adecuar el impuesto a los refrescos se evitan nuevos casos de enfermedades. Aseguró que no hubo pérdidas de empleo como la industria aseguró.


En su intervención el doctor Tonatiuh Barrientos, investigador y director del Centro de Investigaciones de Salud Poblacional del Instituto Nacional de Salud Pública, subrayó que existe evidencia científica que el impuesto a las bebidas azucaradas ha ayudado a disminuir el consumo en México; esa disminución ayuda a mejorar la salud de la población y a bajar los costos de atención médica.


En su participación Ana Larrañaga, coordinadora de la Coalición Contra-Peso subrayó que de acuerdo con la OCDE, las enfermedades relacionadas con el sobrepeso en México, reducirá en 4 años la esperanza de vida de la población durante los próximos treinta años, de ahí la necesidad en adecuar ya el IEPS las bebidas saborizadas.


Los panelistas plantearon la necesidad de que los más pobres deben tener acceso a agua potable, y parte de lo recaudado debe destinarse a este fin.
En otro orden de ideas, doctor Héctor Juan Villarreal, director del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), comentó que el ajuste que propuso el diputado Huerta a la cuota fija de 1.49 pesos por cigarro, incrementaría las participaciones provenientes del IEPS a tabaco en 33 por ciento, en al menos 4 mil 448 millones de pesos y todas las entidades del país verían un incremento en sus participaciones.


Villarreal resaltó que es posible etiquetar la recaudación para el combate de enfermedades provocadas por el tabaco y las bebidas azucaradas. “Creo que la misma industria estaría dispuesta a dialogar si se hacen campañas sociales, es más atractivo decir esto va a financiar el sistema de salud que una bolsa donde no sabemos dónde quedó el dinero», dijo.


La Doctora Belén Sáenz de Miera, investigadora de la Universidad de Baja California Sur, rechazó las aseveraciones de la industria tabacalera de que la imposición de impuestos aumentaría en 17% la venta ilegal de cigarrillos.
«La industria tiende a magnificar el problema, no sólo en México, sino en el mundo. En México es apenas la mitad de lo que ha sostenido la industria. Vuelven a mencionar esta cifra del 17%, cuando la cifra real está muy por debajo de esto (de 8.8%)», dijo Sáenz de Miera.


Finalmente Erick Antonio Ochoa, Director de Salud Justa refirió que en medio de la contracción económica que estamos viviendo en México a consecuencia de la pandemia por COVID-19 se hace necesario tomar medidas eficaces para mantener la atención de la salud de la población. “Hay una imperiosa necesidad de avanzar en estas iniciativas para lograr reducir el efecto negativo en la salud de las personas, no sólo visto como una medida recaudatoria, sino también en términos de salud”.