Como resultado de su permanente inversión en tecnología, la innovación en sus procesos y la prevención de fugas, en tan solo 12 años la industria refresquera logró reducir 35 por ciento el uso de agua para su producción, reveló la Asociación Nacional de Productores de Refrescos y Aguas Carbonatadas (ANPRAC), que precisó que mientras en 2008 se utilizaban 2.12 litros, en 2020 la cifra se ubicó en 1.375 por cada litro de producto.
Con base en ello, el sector agrícola se mantiene como el sector que más consume agua a pesar de las acciones que se han adoptado en distintas entidades para corregir ese problema, principalmente en las zonas donde existe mayor escasez del líquido, situación que afecta el abasto a otros sectores sociales.
De acuerdo con información de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), hasta septiembre de 2021 se tenía el registro de que el 75.7% del agua es de uso agrícola; el 14.7% para abastecimiento público; el 5% para industria autoabastecida, y el 4.6% para energía eléctrica excluye a la hidroelectricidad.
La ANPRAC precisó que el avance registrado en la disminución de consumo de agua en la industria refresquera se debe, entre otros factores, a las siguientes acciones: implementación de novedosos sistemas de prevención de fugas; innovación en sus procesos de producción, y el tratamiento del 100% de las aguas industriales derivadas de su producción. Además, hizo hincapié en que las concesiones de aguas nacionales de sus empresas afiliadas, representan solo el 2 por ciento del volumen total para la industria autoabastecida en México.
En fechas recientes, la zona metropolitana de Monterrey, Nuevo León, enfrentó una crisis por la falta de agua como consecuencia del calentamiento global que acelera la evaporación del agua de los suelos y los cultivos, lo que combinado con la reducción de la precipitación en algunas zonas, agravó la crisis hídrica.
Inicialmente se apuntó que la falta de agua en la región era consecuencia del consumo del líquido en las industrias refresquera y cervecera, pero contrario a incrementar su consumo, ese sector lo ha reducido.
Aunado a ello, algunas empresas embotelladoras han implementado sistemas de depuración de aguas residuales para la industria. Es un proceso de depuración y filtración del agua, lo cual permite limpiarla en 80% y reutilizarla en sistemas de riego o uso sanitario.
Por ejemplo, como parte de su compromiso con la responsabilidad social para un mejor uso y aprovechamiento del agua, Arca Continental hizo alianza con organizaciones como ProNatura, Agua Capital, Global Environment & Technology Foundation (GEFT) y el World Wildlife Fund México (WWF), para impulsar proyectos comunitarios encaminados a ese objetivo.
Otras acción de la industria con un enfoque socialmente responsable, se refieren a la de devolver a la naturaleza más del 100% del agua usada en sus productos; la disminución en 36% del consumo de agua en sus plantas embotelladoras, y regresar anualmente más de 11 mil millones de litros de agua, lo que es equivalente a cinco mil albercas olímpicas.