Con el objetivo de generar espacios de reflexión y discusión sobre los retos de la participación ciudadana y la implementación de nuevos esquemas de interacción, a partir del uso de tecnologías de la información y la comunicación, en el marco de la pandemia derivada del COVID-19, el Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM) continuó con los trabajos del Foro internacional virtual: «Retos de la Participación Ciudadana en esquemas innovadores ante contextos extraordinarios».
Durante la Mesa 2: “Modalidades de la participación, diseños y nuevas formas de participación virtual”, moderada por la Consejera Electoral del IECM, Carolina del Ángel Cruz, señaló que la democracia moderna exige el involucramiento de la sociedad en las actividades de la vida pública y que todas las personas que forman parte de ella participen activamente en la toma de decisiones, para la construcción de una ciudadanía más íntegra y completa.
Indicó que en este proceso de fortalecimiento de la participación ciudadana en nuestra ciudad y con ello la consolidación democrática, se hacen necesarios mecanismos e instrumentos que faciliten a las personas el hecho de poder involucrarse en los acontecimientos de su entorno, pero ante contextos extraordinarios que limitan la participación y ante el contexto actual de la pandemia por el COVID-19, se hacen necesarios espacios de reflexión para la creación de propuestas que contribuyan a generar nuevos espacios de participación ciudadana, a partir del uso de tecnologías de la información y la comunicación.
En su ponencia, el Coordinador Nacional para la iniciativa slowU de la Escuela de Humanidades y Educación del Tec de Monterrey, David Gómez Abad, expuso los pormenores de “Frena la curva”, una iniciativa que nació en España a raíz de la pandemia, la cual es una Red Ciudadana de Solidaridad de cuidados, información, innovación social y resiliencia cívica contra el COVID-19, cuyo objetivo es visibilizar toda la innovación social y ciudadana.
Mencionó que “Frena la curva” ya se ha replicado en muchos países como México, ofreciendo información verificada sobre la pandemia, así como un panorama completo y verídico de lo que sucede. Además, dijo que se comparten consejos de salud y cuidado laboral y, sobre todo, se difunden actividades de participación ciudadana a través de herramientas digitales, tales como foros en los que se visibilizan las iniciativas ciudadanas, mapas que sirve para geolocalizar las iniciativas ciudadanas; y los Laboratorios Ciudadanos Distribuidos, en donde las personas trabajan de forma colaborativa en la realización de proyectos en beneficio de la comunidad.
En su oportunidad, la Académica e Investigadora de la Universidad Autónoma de baja California, Alejandra Leonor Salado Íñiguez, consideró que la crisis global representa un reto para las democracias, pues en situaciones de emergencia sanitaria la ciudadanía es susceptible y está dispuesta renunciar a ciertas libertades y derechos que ha costado mucho ganar, tales como los político-electorales o los espacios en materia de participación ciudadana, lo anterior, con la única intensión detener o mitigar la amenaza que implica la pandemia.
Expuso que muchos países ya han pospuesto sus procesos electorales y ejercicios de participación ciudadana; en este sentido, sostuvo que los recursos digitales pueden disminuir estos impactos y evitar la parálisis total en las elecciones y de las instituciones encargadas de las mismas. Recomendó que la implementación de instrumentos electrónicos deberá ir acompañada de la capacitación de las personas y la ciudadanía; además, consideró que una buena manera para su uso es durante los ejercicios de democracia directa como las consultas ciudadanas, en donde el IECM ha innovado, pues ya ha utilizado diferentes métodos de votación en ejercicios ciudadanos.
Durante la Conferencia Magistral impartida por el Coordinador de la Secretaría Técnica del Observatorio Internacional de la Democracia Participativa, Adriá Duarte Griño, habló sobre una agenda para la democracia electoral en la que se incluyen siete ejes básicos para la participación: democracia local como ecosistema; inclusividad; bienes comunes, comunidad y fortalecimiento ciudadano; infraestructuras digitales; evaluación de las políticas y los programas; autonomía local y relación con otros niveles; y planes estratégicos para la mejora de la calidad democrática.
De igual forma, explicó las virtudes de los diversos tipos de innovaciones democráticas como las asambleas ciudadanas, los presupuestos participativos, la participación infantil y juvenil, así como el uso de las nuevas tecnologías en los procesos electorales, combinándolas con la votación tradicional.
Sobre la participación ciudadana en tiempos del COVID-19, indicó que es necesario tener un aislamiento físico pero no social, pues dijo todo el tiempo debemos conectados a través de los medios electrónicos. “Es importante que la sociedad civil esté presente y activa, pero también que los gobiernos y autoridades no deben ser espectadores pasivos, sino ser facilitadores de los medios necesarios para la organización de encuentros como estos, con la finalidad de no perder el contacto y mantener esta dinámica democrática”.
Apuntó que esta etapa derivada de la pandemia no puede ser una excusa para la democracia y, aunque en muchos países las elecciones se han pospuesto, la democracia no puede detenerse, se debe seguir haciendo vida comunitaria, el debate público debe continuar y no caer en los discursos autoritarios.
Finalmente, Duarte Griño reiteró que “la democracia es muy importante y va más allá de salir a votar, pues entre todas y todos debemos seguir defendiendo los derechos políticos y humanos, pues importante seguir juntos y compartiendo experiencias para que la democracia mejore mucho más en este contexto”.