Por Lourdes Aguilar
Diputados de oposición recibieron la comparecencia de la Secretaría del Bienestar, Ariadna Montiel, con fuertes críticas porque argumentaron que muchos de estos programas se han utilizado para beneficio de Morena, y ahora con el llamado a la próxima marcha que convoco el Presidente Andrés Manuel López Obrador, se están utilizando para que vengan de “acarreados”.
Durante la sesión el diputado por el PRD, Marcelino Castañeda Navarrete, denunció que la dependencia a su cargo no solo no cuenta con un padrón oficial confiable, en el que se justifique la entrega, gastos, sino que denunció que durante esta semana, millones y millones de mexicanas que reciben estos beneficios, han recibido los mensajes de WhatsApp por parte de los “Vividores de la Nación” para la movilización.
Argumentó que lucrar con la pobreza no es de izquierda! ¡Es de cínicos, miserables y oportunistas! Porque ni siquiera se les puede asignar una categoría en el aspecto político. ¡Y claro que no son iguales, son mil veces peores! Quedan más dudas que certezas, y la única certeza que hay, es el uso el uso cínico de los programas sociales para la operación política de su partido.
En su intervención, la diputada Elizabeth Pérez Valdez, vicecoordinadora del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución democrática, dijo que es que esos programas empezaron aquí en la Ciudad de México con los gobiernos perredistas, y son los que hoy le están dando posibilidad a esta ciudadanía de estar un poco mejor si no, claro que estaríamos peor.
La finalidad de estos programas, en ningún momento es contribuir a las necesidades reales de las y los mexicanos; por el contrario, su intención es mantener en la necesidad a la ciudadanía, total y absolutamente dependiente de un gobierno que -a través de dádivas clientelares les impida la libertad financiera y de crecimiento.
Con ellos argumento buscan una ciudadanía amagada y en crisis, su intención no es que existan oportunidades de desarrollo, y a quienes se atrevan a pensar en mejorar, las llama simplemente “aspiracionistas”, y eso, con desdén.
Durante la comparecencia, que se desarrolló en el contexto de la glosa del Cuarto Informe presidencial, la Secretaria del Bienestar, defendió su postura argumentando que la inversión destinada a la pensión para adultos mayores, en los primeros cuatro años del actual gobierno, duplicó la inversión de los dos sexenios anteriores.