En el dinámico y siempre cambiante mundo empresarial, contar con un respaldo sólido en la gestión de riesgos y la valuación de activos es fundamental para asegurar la continuidad y el crecimiento de los negocios.
En el contexto de los seguros, el avalúo es una herramienta crucial que permite estimar el valor de bienes muebles o inmuebles de manera precisa y justificada. Un avalúo adecuado asegura que las pólizas de seguros se ajusten a la realidad y protejan adecuadamente contra cualquier pérdida financiera o de activos.
El proceso de avalúo implica un análisis detallado de las características físicas, de uso, ubicación y condición de los bienes, así como una investigación de mercado realizada por peritos especialistas. Este dictamen técnico imparcial proporciona una estimación del valor reflejada en cifras monetarias, que es fundamental para la correcta implementación de seguros de daños.
De acuerdo con Tasvalúo, compañía mexicana en consultoría, valuación y data, el avalúo debe cumplir con diversas normativas y regulaciones, como el Manual de Valuación Bancaria (Anexo 42 CUB) y la Norma Mexicana de Valuación (R 081 SCFI 2015). Estas normas garantizan que las valuaciones se realicen de manera transparente y conforme a estándares reconocidos, asegurando la confiabilidad y precisión de los informes.
El propósito de una valuación determina la base del valor y el contexto en el que se utilizará el avalúo. Es esencial que las valuaciones no se empleen fuera de su contexto original. Los tipos de valor que pueden determinarse incluyen el valor comercial, de mercado, de cambio, de uso, físico o de reproducción, según las necesidades del solicitante.
La identificación precisa del bien o bienes a valuar es fundamental. Esto incluye la definición de todas las partes que componen el activo. La base de valor debe ser adecuada para el propósito específico de la valuación.
De acuerdo con Javier Abeijón, director general de Tasvalúo, en el contexto de los avalúos, el costo se refiere a los gastos necesarios para reponer un bien, incluyendo elementos directos e indirectos. El precio es la cantidad que se pide, ofrece o paga por un bien o servicio. Una vez que se realiza el intercambio, el precio se convierte en un hecho histórico y se denomina costo. El valor establecido en un avalúo equivale al precio determinado.
Un avalúo adecuado permite implantar pólizas de seguros que protejan contra pérdidas financieras o de activos, enfrentar riesgos comerciales complejos, y asegurar la continuidad y crecimiento de los negocios. Los asesores en gestión de riesgos identifican los principales riesgos, ayudan a contener incidentes, recuperar lo perdido y defender costos frente al asegurador.
Howden, por su parte resaltó que juntas, estas empresas ofrecen a sus clientes soluciones integrales y personalizadas que aseguran la estabilidad y el crecimiento de sus negocios en un entorno cada vez más desafiante.
Con el respaldo adicional de Grupo Tecnicasa y Promecap, las empresas pueden confiar en un apoyo completo y efectivo para todas sus necesidades de seguros y valuación finalizó el director general de Tasvalúo.