¡Extra!… Se acabó el sueño de contar con un sistema de salud como el de los países nórdicos. La promesa de campaña (2018) se transformó en una pesadilla sanitaria que dejó a millones sin servicios médicos y sin medicinas. Una angustia que el secretario de Salud, Jorge Alcocer, calificó de “exagerada”.
Una crisis sanitaria sin precedentes, que en julio pasado llevó a miles de personas en todo el país a marchar para denunciar el desabasto de medicamentos, principalmente oncológicos y exigir al gobierno federal que reorganice sus prioridades económicas para dedicarle todos los recursos necesarios a la solución de este problema.
Al grito de consignas como “quimios sí, consultas no” (en alusión a la consulta para enjuiciar a ex presidentes), “señor Obrador, queremos solución” y “la salud es un derecho”, padres y familiares de personas con enfermedades terminales y crónico degenerativas se han manifestado varias veces en lo que va del sexenio, sin encontrar respuesta.
Lamentablemente, en el corto plazo no habrá soluciones. El gobierno sólo destina el 2.7 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) a la salud. Se trata de una cifra mínima e insuficiente, en especial si se compara con otras naciones como Noruega en donde la cifra es del 8.7 por ciento, Alemania con el 9.5 por ciento y Estados Unidos con el 14.3 por ciento.
En México, la seguridad social está enferma de burocracia e indolencia. Basta ver y padecer la errática estrategia para enfrentar la pandemia por Covid-19 que tiene a su cargo el llamado “Doctor muerte”, Hugo López Gatell, y que ha costado más de medio millón de vidas y ha llevado a los tribunales el derecho de los menores a vacunarse.
Una tragedia que sumó a otras, como les recordó Xóchitl Gálvez, senadora del PAN, al secretario de Salud, Jorge Alcocer, y Juan Antonio Ferrer, director del Insabi, durante su comparecencia ante la Comisión de Salud del Senado de la República, al afirmar que: “estábamos mejor cuando según ustedes estábamos peor”.
Directa como es, la hidalguense, les sorrajó: “el servicio de salud se les fue de las manos”. “De acuerdo con datos del Coneval, hay cerca de 16 millones de mexicanas y mexicanos más que dejaron de tener acceso a servicios médicos. Tan solo de 2018 a 2020 pasamos de tener 20.1 millones a 35.7 millones de personas que se quedaron sin acceso a la atención médica”.
“Son ya tres años de esta administración de la cuarta transformación, ya no se pueden seguir culpando a gobiernos del pasado, que les quede claro, si estaba mal, les tocaba corregirlo y no lo hicieron”, dijo la panista.
Xóchitl, también le diagnóstico al doctor Alcocer: «Secretario, un sector salud que ignora y minimiza los reclamos de niñas, padres y madres de familia no está cumpliendo con su deber… la incapacidad también es corrupción y mata».
Sí, no hay excusa que justifique la crisis de salud que hoy padecemos y cuesta vidas o pone en riesgo otras. Datos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2018-2019, reflejan que en ese periodo el país reportó sus peores niveles de vacunación en los últimos 18 años, ya que sólo el 18.5% de los niños menores de un año cuentan con el esquema de vacunación completo.
Una tragedia que traerá graves consecuencias en el mediano plazo. Sylvana Beltrones, senadora del PRI, denunció que el año pasado uno de cada cuatro menores de un año de
edad, se quedó sin el esquema básico de vacunación que los protege contra enfermedades que ya se encontraban erradicadas o controladas, como lo es la tuberculosis, la hepatitis B, la tosferina, el sarampión, la rubiola, el rotavirus.
Mientras que la legisladora priista, Nubia Mayorga, les preguntó: “¿Cómo quieren que les ayudemos desde el Senado para que los niños con cáncer ya no se sigan muriendo? ¡Se han muerto más de mil 500 niños por no haber recibido sus terapias!».
Así las cosas, todo indica que la crisis se agudizará. Al gobierno que antepone -todos los días- en el discurso al “pueblo sabio”, no le importa que el gasto familiar de los mexicanos se haya incrementado en un 42 por ciento por falta de acceso a la salud y por el desmantelamiento del servicio en los estados.
Vericuentos
México, basurero automotriz
Una vez más, las estrategias electoreras, afectan a los empresarios nacionales. La decisión del presidente López Obrador de regularizar los autos “chocolate”, deja al sector automotriz en situación crítica. Por ello, la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), advierte que la medida convertirá a México en un basurero automotriz y pone en riesgo el empleo de dos millones de personas. Su dirigente José Medina Mora Icaza, explicó que, en un afán de conquista de simpatías o aprobación política, se ofrece un cheque en blanco a la delincuencia y provocará una caída del 39% en ventas en el mercado nacional. Desde 1979 se han registrado 19 esquemas de legalizar lo ilegal y nada se resuelve, el contrabando de autos persiste en un mercado interno que desde el 2016 cae. ¡Sopas!
@guillegomora