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Con el pie izquierdo inicia el 2020 el subsecretario de Gobernación, Alejandro Encinas, quien solicitó al Instituto Nacional Electoral (INE) el traslado de la base de datos biométricos de 90.1 millones de ciudadanos del padrón. La respuesta fue NO.

Marco Antonio Baños, consejero electoral, afirmó que el INE evitará el manejo político de los datos personales de los electores, pues la entrega de esta información generaría dudas sobre el uso imparcial por parte del Instituto en las elecciones, además de la seguridad.

Totalmente de acuerdo. El control del padrón electoral debe estar exento de las tentaciones políticas y populistas. El argumento de crear la cédula de identidad, que los ahora funcionarios en el poder denostaron y descalificaron durante los gobiernos panistas, llama a la sospecha, justo a un año de que inicie “la madre de todas las elecciones”.

En política no hay casualidades, hay causalidades y en la #4Transformación la lucha por el poder tiene en la mira el control del INE. Así que mientras se aprueba la reforma para tomarlo, pues quieren el padrón electoral que les daría ventajas competitivas en las elecciones del 2021.

Ya veremos cómo termina este litigio político que, como advierte el consejero Baños, también es un problema de seguridad, pues nuestros datos personales pueden caer en manos extrañas.

Baste recordar el 2013 cuando el Partido Convergencia, (hoy Movimiento Ciudadano) estuvo involucrado en la filtración sobre la venta de bases de datos resguardadas por el IFE, a través del portal “buscardatos.com”, con sede en Suecia.

En 2016 reincidió; un investigador de la empresa de seguridad MacKeeper, Chris Vickery, reveló que la base de datos de la Lista Nominal de Electores —con 93.4 millones de datos personales como nombre y domicilio de los votantes mexicanos— estaba disponible en un servidor de internet de Amazon, sin contraseñas ni protección.

Su dirigente Dante Delgado, dijo que fue “un asalto cibernético”. Nada pasó, sólo unas multas económicas, ni siquiera un ultimátum, para quitarle el registro.

Producto de estos escándalos las bases ya no se entregan a los partidos políticos desde hace 3 años y el INE trabaja con sistemas informáticos encriptados.

Sin embargo, no es suficiente, en México, los datos personales de millones de personas se pueden conseguir en el mercado negro por 820 pesos, así lo denunció Víctor Manuel Garay, secretario general de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

El académico detalló que, dependiendo de la oferta y la demanda, en el mercado negro se pagan 203 pesos por entregar el nombre completo de una persona, 162 por su fecha de nacimiento, 235 por su firma electrónica y 220 pesos por su teléfono particular.

Datos por demás alarmantes ante la inseguridad creciente que se registra en el país y el robo de identidad, que lamentablemente no son novedad, ya que en 2010 y 2012, los diarios El Universal y La Razón, respectivamente, publicaron como en el Barrio de Tepito, se podía obtener por 15 mil pesos, en forma digital con acceso directo a todo tipo de computadoras, el padrón electoral.

Así las cosas, ¿qué necesidad de empezar con el tráfico de datos personales de más de 90 millones de mexicanos y de poner en riesgo al sistema político?  ¿Realmente se necesita una cédula de identidad cuando existe la credencial electoral y la CURP?

En la lucha por el poder, no sólo está en riesgo la credibilidad del árbitro electoral, sino la seguridad nacional. Tantita prudencia e inteligencia no le vendría mal a la entusiasta #4Transformación en su segundo año de gobierno. ¿Cuál es la prisa?

Vericuentos

Senado – Cannabis Reload

Una vez más se buscará en el Senado que transite la regulación del cannabis, Ricardo Monreal Ávila, presidente de la Junta de Coordinación Política, pretende que sea uno de los temas principales en el próximo periodo que inicia en febrero. La agenda legislativa contempla Parlamento Abierto, dictámenes, debate parlamentario, foros, acuerdos e iniciativas con especialistas, empresarios y sociedad civil. Van contrarreloj, la única prórroga que otorgó la Suprema Corte de Justicia de la Nación vence el 30 de abril de 2020. ¡Órale!

Seguridad sin colores

Luego del terrible cierre de 2019 con elevados índices de asesinatos y actos delincuenciales, René Juárez Cisneros, coordinador parlamentario del PRI en Cámara de Diputados, exhortó a que los temas de Estado, como el de la seguridad pública, no deben estar acotados por la vida partidaria, por colores, porque la visión se estrecha. “Debemos entender que el país vive una situación tan complicada, tan difícil, que nos requiere a todos… no me gusta que no se impulse un llamado a la reconciliación, a la unidad nacional”, dijo el guerrerense. ¡Vientos!

@guillegomora