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Se sabe que hace unos días, mientras se examinaba el plan de conectividad terrestre del aeropuerto de Santa Lucía, los asesores de Andrés Manuel López Obrador le plantearon el beneficio de “desdoblar” algunas concesiones urbanas para que conecten con el Circuito Exterior Mexiquense y Arco Norte… pero el presidente rechazó la propuesta e insistió en desarrollar vialidades con recursos públicos cuando ya era visible el golpe que tendrá sobre las finanzas públicas la caída del petróleo y la expansión del coronavirus.

Al grupo más radical al interior del gobierno federal no le gustan las alianzas público-privados, ni concesiones ni ninguna otra solución “neoliberal” y cree fehacientemente que el los recursos públicos son suficientes para el desarrollo de infraestructura de transporte, hospitalaria, urbana y energética… aunque, por ejemplo, Pemex, hoy fuera de los esquemas de asociación con particulares, no ha podido saldar deudas cercanas a los 40 mil millones de pesos y enfrenta una posible paro de proveedores y demandas mercantiles.

En el caso de las Vialidades a Santa Lucía, algunos libramientos de la zona suroriente de la capital, concesionados a la portuguesa Mota Engil que lleva Joao Parreira, podrían ampliarse para dar salida terrestre hacia el actual AICM y de ahí conectar a los caminos hacia el aeródromo en proceso; algo similar puede suceder con el Tren Suburbano que dirige Max Zurita, donde el gobierno federal tiene 49% de las acciones a través de Banobras, ya se realiza el estudio de costo-beneficio para ampliar la actual concesión de Lechería a Nextlalpan… pero también hay reticencia de una parte del gabinete a que participen los particulares.

Y ahora #ConLasChelasNo

De manera contradictoria, mientras el presidente decía en Acapulco, ante los banqueros que encabeza Luis Niño de Rivera, que había condiciones inmejorables para crecer en México y fortaleza para l inversión, avanzaba la Consulta Popular que Segob, a cargo de Olga Sánchez Cordero, para determinar sí continúa o se cancela el proyecto de inversión privada de Constellation Brands en Mexicali. La Alcaldesa del lugar, María del Pilar Ávila, ya advierte que la consulta de este fin de semana se podría posponer ante el riesgo de contagio de coronavirus; sin embargo, cuando efectúe la decisión será tomada por el primer mandatario con el riesgo de mandar otra señal funesta (cancelación por “voluntad popular”) a los inversionistas que desea atraer. Con ello  expondría a México -en medio de una recesión- a un panel arbitral ante el TMEC al violar el Capítulo 11 en contra de la cervecería que aquí lleva Daniel Baima, tal y como el presidente lo ha escuchado del canciller Marcelo Ebrard, de la secretaria Graciela Márquez y del el coordinador económico Alfonso Romo. La señal enviada sería tan mala, en su proporción, como la cancelación del NAIM.

La Favorita de Arca

Ante la zozobra económica que genera la pandemia, resulta refrescante que la regiomontana Arca Continental, Jorge Humberto Santos Reyna, también fuera la acreedora al Premio Nacional de Calidad 2020; así, una de las embotelladoras más importantes del mundo para Coca-Cola puso el ejemplo de excelencia el Sistema de Gestión Integral en Piso utilizado en su planta La Favorita, en Jalisco, lque con todos sus indicadores de desempeños por área logra la automatización, la innovación, un desempeño ambientalmente sustentable y además garantiza la seguridad de sus colaboradores. ¿Un refresquito?

mflores37@yahoo.es

@mfloresarellano