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La exigencia de la representación comercial de Estados Unidos (USTR) al mando de Margaret Tai, es clara a plazo fijo: corre un plazo de 100 días para que chamanes, concheros y merolicos de la Secretaría de Salud que en sus ratos libres representa Jorge Alcocer, de lo que queda del Consejo Nacional para la Ciencia y Tecnología que sahúma María Elena Álvarez-Buylla, y la Comisión Federal de Prevención de Riesgos Sanitarios de Alejandro “Centella” Svarch, desacrediten 3 décadas de investigación científica de los más prestigiados institutos de EU sobre la inocuidad alimentaria del maíz amarillo transgénico.

Y, obvio, no lo podrán hacer, por el sencillo hecho de que no cuentan con publicación científica seria que haya encontrado que las variedades comerciales de semillas genéricamente mejoradas (y en un proceso continuo de desarrollo) para soportar sequías y ciertas plagas constituyan un riesgo para las personas, animales o medio ambiente. Por tanto, a mediados de septiembre próximo, Andrés Manuel López Obrador tendrá dos opciones: cancelar el decreto con que se prohíbe la comercialización de ese tipo de maíz amarillo y se evitar un Panel de Controversia en el marco del TMEC, o, ya encarrerado en la nominación de la “Corcholata Ganadora” y al calor de las Fiestas Patrias, defiende cual si fueran copal sagrado esos mitos, prejuicios y chismes que le proporcionan sus asesores.

Pero independientemente de la decisión, es inevitable el desgaste que este asunto en sí mismo generará en la relación bilateral. Si bien el primer punto de enfrentamiento está en el comercio agrícola (donde las agroexportaciones mexicanas quedan expuestas a represalias), es inevitable que el caso figure en la narrativa electoral en ambos países y genere, por tanto, posicionamientos radicalizados en una relación bilateral innecesariamente ya tensa.

No, el problema no es para el canciller Marcelo Ebrard (que, según él, es positivo haya paneles por según antes no había), sino para la titular de Economía, Raquel Buenrostro que ahora encabeza la negociación del maíz amarillo (portando los mitos mexicanistas) ante la USTR al tiempo que promueve las inversiones privadas en el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec… y ya sin el soporte de la oficina de expertos en Washington desde diciembre pasado.

Morena “levantamuertos” en la MH

Pues trascendió que el Instituto Electoral de la Ciudad de México, que encabeza Patricia Avendaño, está listo para dar los resultados de las firmas promovidas por Morena para la revocación de mandato en la alcaldía Miguel Hidalgo… o sea para intentar remover a Mauricio Tabe. Pero como que los del partido guinda se van a quedar con las ganas: nos aseguran que por lo menos una tercera parte de las firmas -algo así como 15 mil- estarían duplicadas e incluso hay quienes advierten la posibilidad de qué personas fallecidas hayan rubricado la consulta de revocación, tal y como lo hizo la asociación obradorista “Que siga la democracia” durante la revocación de mandato del Presidente en abril de 2022.

Por supuesto, le corresponde a la autoridad electoral no solo realizar al conteo y acreditación -o no- de las firmas, sino también tomar en cuenta las denuncias hechas por condicionamiento ayudas y beneficios gubernamentales a cambio de apoyar la solicitud de revocación. Y es que como tal ejercicio en la MH estuvo politizado por funcionarios y militantes de Morena, no vaya a ser que resulte que también se usaron los padrones de los programas sociales para “sumar” las firmas requeridas… aunque hayan resucitado a algunos.

Conesa preside SkyTeam

La nueva buena es que el director general de Aeroméxico, Andrés Conesa, fue nombrado presidente de la megalianza internacional de aerolíneas SkyTem, siendo Aeroméxico una de las cuatro firmas que hace 23 años se unieron para generar sinergias comerciales a favor de sus clientes y enfocadas al desarrollo de nuevas tecnologías del transporte aéreo. Son 19 las firmas, de las más grandes del mundo (Delta, Korean Air, Air Europa, Air France, Kenya Airways, Saudia, Garuda Indonesia, etc) las integrantes de la alianza que tiene como líder a quién conjuntó voluntades para la reestructura y capitalización de la aerolínea bandera de México.

Desabasto histórico

Pues este 2023 se perfila como uno de desbasto histórico de medicamentos y material hospitalario, probablemente mas agudo que en 2021 cuando al fracaso de la UNOPS (conducido por el Club de los Pibes de Giuseppe Mancinelli) obligó a la mayoría de las instituciones públicas de salud a practicar el “sálvese quien pueda” y compraron insumos al precio y la cantidad que fuese. Antes de su muerte, el INSABI de Juan Ferrer había adquirido unos 150 millones de piezas para 2023 (y sin resolver el problema de la distribución de última milla) cuando, conforme a las mediciones del INEFAM que dirige Enrique Martínez y encabeza Carlos Ferreyra, habitualmente se compran entre 400 millones y 300 millones de piezas en un primer trimestre. Mi gente, ya se la saben.

@mfloresarellano

floresarellanomauricio@gmail.com