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La sequía observada en varios estados en 2019 ha comenzado a afectar cultivos de trigo, maíz y caña de azúcar, por lo que se ha encendido una luz ámbar en el campo mexicano.

En el caso de la caída en la producción de caña propiciará que la zafra 2019-2020 sea menor, lo que pegará en los ingresos de campesinos de estados como San Luis Potosí, Tamaulipas, Veracruz, Quintana Roo, Tabasco y Campeche.

Para Carlos Blackaller Ayala, presidente de la Unión Nacional de Cañeros la menor lluvia observada el año pasado debe ser una llamada de alerta para la Sagarpa de Victor Villalobos Arámbula en los planes de la 4T para ampliar la producción de alimentos.

En algunas zonas como la Huasteca Potosina la sequía afectó la mitad de la producción de caña, lo que impactará en la producción de azúcar, a lo que se suma que en Estados Unidos el invierno se adelantó afectando los cultivos de remolacha, lo que propiciará demanda adicional del dulce en el año que inicia.

La caída en la producción de caña afectará más a los campesinos que tienen deudas, por lo que para los expertos del sector el gobierno federal tendría que apoyarlos para que dispongan de recursos para sembrar, de ahí la importancia de las gestiones que pueda realizar en las próximas semanas la Sagarpa en un año donde volvió a sufrir un ajuste a su presupuesto.

Blackaller estima que la sequía implicará la pérdida de 600 mil toneladas de azúcar, lo que implicó que se hayan dejado de cosechar 6 millones de toneladas de caña equivalentes a unas 90 mil hectáreas.

En la parte de los ingresos, agrega, 6 millones de toneladas de azúcar menos equivale a 1.3 millones de jornales a razón de 50 pesos por tonelada, es decir se perdieron 300 millones de pesos por salarios que no se van a generar.

A esa cifra habrá que quitar además la carga y acarreo de la caña que significan 90 pesos por tonelada lo que significaría una perdida adicional de otros 540 millones de pesos lo que arroja un impacto económico para los cañeros de 930 millones de pesos, además que la falta de agua propició que en una gran cantidad de hectáreas se perdiera la cepa, lo que impactaría en el próximo cultivo.

En el balance de producción de azúcar para la zafra en puerta México produciría 6.5 millones de toneladas de azúcar a partir de un volumen previo de 5.8 millones y donde el consumo local es de 4 millones de toneladas.

Los excedentes de azúcar, a razón de 1.2 millones de toneladas se podrían enviar a Estados Unidos, y el resto unas 600 mil toneladas al mercado internacional donde tiene un precio castigado, aunque ese escenario podría mejorar relativamente por una mayor demanda de azúcar refinada al otro lado del río Bravo por la pérdida de los cultivos de remolacha por las heladas que le comento.

La ruta del dinero

Carlos Slim Helú podría convertirse en el auténtico Rey Midas de los mercados bursátiles si logra colocar de nueva cuenta a Telmex a partir de capitalizar los pasivos laborales de los telefonistas. La jugada sentaría un precedente para empresas globales con elevado pago de pensiones donde están armadoras de autos y aerolíneas,  e incluso a nivel local serviría a empresas muy endeudadas como Pemex.