Por Virginia Pérez Souza/Foto Francisco Geminiano
El Presidente Andrés Manuel López Obrador confió que el Congreso sigan actuando los legisladores con rectitud e integridad como auténticos representantes del pueblo.
Dijo que antes el Congreso era un tianguis, se comerciaba todo, se billeteaba. SE intercambiaban los votos, se conseguían los votos por dinero, se compraban los votos. Había gastos excesivos en todos: viáticos, hasta 10 asesores, boletos de avión en primera clase, usaban aviones del gobierno
Está demostrado que en el caso de las reformas estructurales se pagó a los legisladores. No a todos pero está abierto el juicio de cómo lograron votos para que se aprobara la reforma energética. Que el propio ex director de Pemex declaró que se entregaban sobornos a los legisladores para que se aprobara la reforma energética.
Destacó que esa es una parte porque había partidas de moches, cada vez que se iba a aprobar una reforma o en vísperas de aprobar el presupuesto ponían hasta carpas y traían de los estados comida y bebida para atender a los diputados, para agraciarlos y obtener los votos.
Indicó que la Constitución la usaban para robar. Eso ya no sucede y quien traiciona le va muy mal, porque antes hasta se veía normal, hasta se les aplaudía y ahora no. Ahora es una vergüenza y ya no hay simulación.
Dijo que los legisladores son representantes del pueblo , no representantes de partidos.
Y de acuerdo al partido que pertenecen ellos asumen o se identifican con un proyecto de Nación.
Que cuando el ciudadano vota, lo hace por el candidato, por el partido y el proyecto de Nación.
Los legisladores son libres, no se les puede prohibir que cambien de partido, pero sí lo recomendable es que actúen de manera consecuente a lo que ofrecieron durante la campaña, que se mantengan fieles al pueblo.
Inclusive, dijo, que pongan por delante el interés del pueblo y la Nación por muy legítimos que sean sus intereses personales.