Lourdes Aguilar /Foto Francisco Geminiano
El Presidente Andrés Manuel López Obrador presentó su campaña “Juntos por la paz”, contra las adicciones, y llamó a cerrar filas a todos los mexicanos para ayudar a los jóvenes a evitar el consumo de drogas.
El mandatario, aseguró que con esta estrategia “nunca más se le dará la espalda a los jóvenes” y se les abrazará para evitar que sean enganchados por los grupos criminales.
López Obrador detalló que la estrategia nacional es para combatir y prevenir las adicciones, como parte del plan para atender de fondo al problema de la inseguridad y la violencia, y llamó a la población a cerrar filas para ayudar a informar y orientar a los jóvenes.
Anunció que hoy se cuenta con centros de atención para atender ese problema de adición de los jóvenes, por que antes se les criticaba pero no se hacía nada.
Dijo que la decisión de crear la Guardia Nacional fue la mejor opción porque ya no había otra manera de controlar la delincuencia.
A su vez, el coordinador de Comunicación Social de la Presidencia, Jesús Ramírez Cuevas, explicó que se trata de una convocatoria social, para utilizar todas las capacidades del Estado por el rescate de jóvenes y niños, así como la recuperación del espacio público, bajo el eslogan “Juntos por la Paz”.
Explicó que en las plazas públicas se crearán clubes por la paz para dar a conocer las ofertas culturales, educativas, deportivas y sociales e informar y tener materiales para canalizar a las personas que tienen problemas de adicciones y acercarlos a los centros de salud.
Se trata de un esfuerzo conjunto que harán las instituciones con la sociedad, que va más allá de atender y prevenir las adicciones, ya que implica recuperar la salud emocional y mental de la sociedad.
De esta manera se convoca a padres de familia, maestros, trabajadores sociales, médicos, artistas, creativos, creadores y todos los mexicanos para sumarse al esfuerzo conjunto de “recuperar la capacidad que tenemos para decidir sobre nuestra propia vida”.
La estrategia comprende la escucha, que representa un cambio de paradigma, pues “primero, y lo más importante, antes de juzgar, antes de definir a una persona o estigmatizarla, escuchemos. Escuchemos a los niños, a los adolescentes, escuchémonos en la familia y en el salón de clases”, afirmó Jesús Ramírez.
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