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Secretaría de Salud recomienda intensificar cuidados en la conservación de alimentos, lavar las manos cuantas veces sea necesario y tomar agua simple, hervida o clorada

Más de 70% de las infecciones gastrointestinales son de origen viral; 15%, bacterianas y el resto, parasitarias

Automedicación puede complicar el diagnóstico de patologías gastrointestinales serias

Ciudad de México, 16 de abril de 2024.- Más de 70 por ciento de los diagnósticos de patologías gastrointestinales son infecciones de carácter viral; 15 por ciento de tipo bacteriana, y el resto de índole parasitaria, informaron especialistas de los Institutos Nacionales de Salud y Hospitales de Alta Especialidad de la Secretaría de Salud.

Los cuadros de gastroenteritis son más frecuentes en épocas de altas temperaturas ambientales en virtud de que facilitan la aparición de bacterias, virus y parásitos en los alimentos y en el agua.

Por lo anterior, subrayaron la importancia de extremar precauciones en la conservación de los alimentos y en el mantenimiento de la higiene personal, a través del adecuado lavado de manos con agua y jabón cuantas veces sea necesario.

Es importante también consumir agua simple potable, hervida o clorada, y atender cualquier signo o síntoma que pueda indicar una infección gastrointestinal y, de ser el caso, acudir a la clínica o centro de salud más cercano.

Los síntomas de infecciones gastrointestinales más comunes son: vómito, diarrea, fiebre, dolor abdominal y deshidratación. En estos casos es importante evitar detener la diarrea mediante el uso de medicamentos, disminuir la fiebre con antipiréticos o aliviar el dolor estomacal con analgésicos, porque puede dificultar el diagnóstico del tipo de infección u otra condición grave.

En cuanto a la diferenciación sintomatológica entre las infecciones virales, bacterianas y parasitarias, explicaron que mientras las infecciones virales causan síntomas como diarrea sin sangre, vómito y febrícula, las bacterianas generan un considerable aumento de temperatura y diarrea con sangre. Las parasitarias, por lo general, no generan fiebre ni dolor y tienen como principal síntoma, la diarrea.

Debido a que los cuadros clínicos de estos padecimientos son muy parecidos, la capacidad y sensibilidad de la médica o el médico tratante es fundamental para iniciar terapias farmacológicas y de rehidratación. También existen estudios específicos para identificar el tipo de infección, incluso el patógeno viral, bacteriano o parasitario.

Las infecciones virales se detectan a través de un estudio que se llama panel viral en heces; las bacterianas se confirman mediante el resultado de un coprocultivo y las parasitarias con análisis coproparasitoscópico.