Compartir

El intercambio de descalificaciones entre Clara Brugada y Santiago Taboada y las palomitas de Salomón Chertorivski fue lo que más destacó en el primer debate de la CDMX 2024.

Los tres candidatos presentaron planes ambiciosos para la ciudad; sin embargo, las propuestas se vieron mermadas por la falta de detalles sobre su financiación y ejecución. Desde sistemas públicos de cuidado hasta la extensión de líneas de metro, los planes quedaron en el aire sin respuestas claras sobre su viabilidad.

La estrategia de evadir ciertas acusaciones lanzando otras nuevas resultó en una falta de claridad y transparencia. Específicamente, acusaciones serias como las dirigidas a Brugada sobre los contratos otorgados durante su gestión como alcaldesa de Iztapalapa, lo mismo que las dirigidas a Taboada sobre su presunta asociación con el “cartel inmobiliario”.

Cada candidato se declaró ganador del debate en sus redes sociales, destacando sus propias intervenciones y criticando las de sus oponentes. La ciudadanía, por su parte, reaccionó con una mezcla de crítica y humor, generando memes y comentarios en las redes sociales.