Por Lourdes Aguilar
Gustavo de Hoyos, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), demandó a la actual administración cambiar sus decisiones financieras, porque no han coadyuvado a mejorar la imagen de nuestro país ante las calificadoras internacionales.
Aclaró que la degradación que dio Fitch Ratings y Moody’s a la calificación de Petróleos Mexicanos (Pemex) demuestran “los errores que se están cometiendo actualmente en materia de política energética y administración pública”, por lo que es urgente un cambio de timón como parte de una decisión financiera del país,
Consideró necesarios cambiar “el timón”, porque “Ni el Aeropuerto de Santa Lucía, ni la refinería de Dos Bocas, los proyectos estrella de esta administración, están cumpliendo a cabalidad estos requisitos. En Santa Lucía se acaban de suspender las obras de su construcción hasta que no se cuenten con los estudios ambientales y arqueológicos pertinentes”, cuestionó.
En su mensaje semanal La Señal Coparmex, De Hoyos advirtió que la degradación a las empresas les impide ser atractivas y sobre todo, dejan al gobierno federal en una situación aún más precaria en cuanto a su deuda.
Consideró que será más difícil que Pemex y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) atraigan inversionistas nuevos, además el costo del pago de su deuda se incrementará.
Porque dijo que “México requiere proyectos de inversión estratégicos que cumplan con la ley y no sean producto de caprichos políticos”.
El dirigente del sector patronal de México, el haber pasado de una calificación estable a negativa, dejará graves consecuencias que no sólo se acotarán al sector público, sino que afectarán la capacidad productiva de la economía mexicana en su conjunto.
“Las decisiones equivocadas del gobierno son las claras responsables de estos hechos. Ambas agencias justificaron sus decisiones de degradación en la desconfianza que les generan las estrategias del gobierno federal”.
Finalmente consideró necesario replantear la forma estratégica y responsable en el manejo de las finanzas públicas de nuestro país, así como los grandes proyectos de inversión del sexenio.