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Por Lourdes Aguilar

Empresarios del país, estimaron que con la operación comercial del gasoducto marino Texas-Tuxpan, habrá inversiones por 18 mil millones de dólares al sur-sureste del país.

En conferencia de prensa conjunta, el presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), Francisco Cervantes Díaz; el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y la Asociación Nacional de la Industria Química (ANIQ), el líder del sector productivo del país consideraron que con esta infraestructura el sur-sureste comenzará su desarrollo a corto y mediano plazos.

El líder de la Concamin, detalló que con esta nueva operación se trasportará diariamente 2 mil 600 millones de pies cúbicos de gas, además de que diversas ramas de la industria van a establecerse en esa zona, pues no sólo garantiza el abasto de ese combustible que utilizan en su proceso productivo, sino también la energía eléctrica a precios competitivos, ya que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) lo utiliza para producir a bajos costos.

Hasta este momento, dijo, la inversión en el sector eléctrico asciende a 750 millones de dólares, la cual puede crecer hasta mil 700 millones, a la cual se sumarán cuatro proyectos que aportarían alrededor de 18 mil millones de dólares, cantidad que puede ser anunciada en los próximos días.

Por su parte, José María Bermúdez Minutti, presidente de la ANIQ, recordó que durante la pasada administración esa rama industrial invirtió 17 mil millones de dólares en activos fijos, de los cuales una buena parte fue colocada en Coatzacoalcos, Veracruz, y que la capacidad instalada sólo operó a 70 por ciento.

Sin embargo, con el ducto en operación se puede pasar a una segunda etapa, donde se busca un diálogo con el gobierno para acceder a 800 millones de pies cúbicos de gas natural, además de repetir el monto de inversión en los siguientes seis años.

Carlos Salazar Lomelín, presidente del CCE, dijo aún se requiere construir infraestructuras para transportar ese energético, por lo que destacó la importancia de terminar la red de ductos que hace falta en Yucatán, en la península de Baja California y en algunas regiones del Pacífico, así como en occidente.

Resaltó que el ducto marino de Texas-Tuxpan tuvo una inversión de 2 mil 600 millones de dólares, donde TC Energy Corporation prestó el 60 por ciento del capital, mientras IEnova puso el resto.