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La tragicomedia de Notimex ya llegó a un nivel de conflictividad que pone en riesgo tanto a trabajadores y periodistas, como al Derecho a la Información.

            La dirección de esta agencia noticiosa del Estado, por parte de Sanjuana Martínez, ha generado crecientes agravios y desencuentros políticos, lo cual evidencia que Notimex ha sido dirigida no como una institución de Estado, sino como un instrumento político.

            Bajo el argumento cada vez menos efectivo de que el sindicato de Notimex y muchos de sus connotados periodistas eran corruptos y estaban al servicio de “la mafia del poder”, Sanjuana Martínez desató una persecución de presuntos enemigos y arrastró a otros actores que, riesgosamente, incurrieron en un conflicto ajeno.

            Tal es el caso de los legisladores de MORENA. En concreto, podemos decir que en los últimos días se les presionó para que firmaran un posicionamiento de apoyo incondicional a la directiva de la agencia noticiosa oficial, para defenderla tanto de sus trabajadores que están en huelga, como de las críticas y denuncias que llueven por todas partes contra Sanjuana Martínez. La gran mayoría de los diputados morenistas no estuvo de acuerdo en sumarse a un conflicto que consideran escandalosamente parcial, manipulador y atentatorio contra los derechos laborales.

            Ese posicionamiento finalmente lo publicaron ayer, pero solo fue firmado por 10 de los 259 diputados de MORENA. Las firmas fueron encabezadas por la diputada María de los Ángeles Huerta a quien, en la última reunión de la bancada del partido, Mario Delgado señaló como responsable de “la guerra sucia contra los opositores de la 4T”. También firmó la diputada Claudia Yáñez, hermana de César Yáñez, el otrora poderoso vocero de AMLO.

            El gran resto de los diputados morenistas que se negaron a defender a Sanjuana Martínez tiene, con todo respeto, razón. Basta ver el siguiente pasaje del posicionamiento:

            “No hay ningún derecho absoluto y el derecho de los trabajadores del sindicato no se debe anteponer, ni debe prevalecer sobre el derecho a la información de todos los mexicanos; de manera que es imprescindible anteponer el interés público al interés privado. La pretendida suspensión de labores, aunque se fundamente en una declaración de huelga existente, está transgrediendo derechos de terceros cuyo daño se consumaría de forma irreparable.”

            Esto enojó a muchos diputados: que se trate de minimizar los derechos laborales de los trabajadores de Notimex colocando como algo superior el derecho a la información y, sobre todo, que se minimice el derecho de huelga, justamente ahora que el gobierno de AMLO festeja como logro las reformas legales que fortalecen la democracia sindical.

            Por todas estas razones urge solucionar el caos que se vive en Notimex, antes de que comiencen a estallar públicamente los desencuentros políticos por la devaluación de principios innegociables como los derechos de los trabajadores.

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