Ante la posibilidad de que la USTR de Katherine Tai lleve al México a los Panales de Resolución de Controversias del TMEC en las próximas semanas por la política energética del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, una misión que resulta de importancia estratégica es diversificar las fuentes de importación de gasolinas que hoy provienen principalmente de firmas estadounidenses; si bien el intenso programa de reparación de las seis refinerías en el que se ha empeñado la secretaria de energía Rocío Nahle ha permitido aumentar la dotación local, aún se importa cerca de 59% de los combustibles que se consumen en el país.
En su momento, Dos Bocas puede reducir de manera consistente las importaciones, pero el asunto es que como país estamos próximos a un conflicto que puede repercutir sobre los sistemas de movilidad y transporte, pues la coyuntura mundial también se perfila compleja. De hecho, la oficina de la Casa Blanca anunció nuevas medidas del presidente Joe Biden para fortalecer la seguridad energética de los Estados Unidos, alentar la producción de hidrocarburos en ese país y bajar el costo de los combustibles a nivel mundial.
Como es sabido, ante la negativa de la OPEP, que encabeza Bruno Jean-Richard Itoua, de aumentar la producción petrolera, Biden anunció la venta de 15 millones de barriles de la Reserva Estratégica de Petróleo, que completa la histórica venta de 180 millones que se anunció en la primavera. Afirmó, además, que recomprará crudo para mantener las reservas y llamó a las empresas a bajar los costos de los combustibles dirigidos al público en un intento por controlar la presión inflacionaria en su territorio.
Mientras esto sucede los países árabes decidieron no acompañar a Estados Unidos en la estrategia, pues les conviene mantener precios altos sin afectar sus reservas… al tiempo que mantienen las puertas abiertas a los oligarcas rusos.
Para un país como México que compra en el exterior 6 de cada 10 litro de combustibles que produce, implica una alta vulnerabilidad dado que 90% proviene de Estados Unidos. La dependencia es aún más notable en el gas natural, pues 68% del consumo se abastece de importaciones… por lo que somo los principales clientes de los vecinos del norte.
O sea que el discurso de la autosuficiencia energética dista mucho de la realidad en un hemisferio occidental con recesión en puerta y determinado a mantener aislada a la Rusia Imperial de Vladimir Putin.
Por tanto resulta estratégico y hasta de seguridad nacional que México forme alianzas para diversificar nuestras fuentes suministro… pues hasta el momento el gobierno de López sólo mantiene conversaciones con empresas estadounidenses, en específico cinco de ellas.
¿Un mundo sin autos?
A mediados de octubre se realizó el Sexto Foro de la Asociación Mexicana de Arrendadores de Vehículos que encabeza Alberto Gómez, organización que agrupa a las principales firmas de arrendamiento en México en una actividad que representa cerca de 3% del PIB. El asunto más destacado es la falta de vehículos en el mercado, tanto mayorista como menudista, tanto por el encarecimiento y escases de componentes electrónicos como por la persistente distorsión de las redes de suministro. Sin embargo, la agrupación que dirige Liliana Anaya diseña soluciones estratégicas para hacer frente a problemas de alcance global. Ya le cuento.
EL Cash en Iztacalco
Algo está pasando en la Alcaldía Iztacalco -ahora que está de moda el “cash”- porque empleados de la Dirección Jurídica de la demarcación a cargo de Araceli Guerrero, bajo diversos pretextos, cierran decenas de pequeños establecimientos comerciales y de servicios; y para quitar los sellos y que puedan reabrir sus negocios, les piden a los propietarios entre 35,000 y 50,000 pesos, claro, en efectivo. En la 4T presumen que están combatiendo la corrupción, pero como se ve en la morenista Alcaldía Iztacalco, los empleados jurídicos de Armando Quintero, estiran la mano por su cuenta aunque dañen la actividad comercial y el sustento de cientos de familias. Una de las abogadas de los afectados, Ericka Martínez, señala que se trata de clausuras arbitrarias, que les niegan derecho de audiencia y que muchos llevan meses intentando reabrir sus negocios… pero que los empleados de Asuntos Jurídicos no los reciben y solo autorizan la reapertura de aquellos negocios que pagan el “moche” disfrazado de multa. Cuide su cartera.
@mfloresarellano