Compartir

No ha dejado de moverse por las “exbenditas redes sociales”, la rechifla que se llevó ni más ni menos que la candidata de Morena y rémoras al gobierno de Veracruz, Rocío Nahle, cuando llegó al conocido café La Parroquia del puerto de donde “salió por cuerdas”.

Pues bien, a esto debe agregarse lo que dio a conocer en la Ciudad de México, el abanderado de la coalición Fuerza y Corazón por México, Pepe Yunes Zorrilla y que terminó por dejar más que incómoda a la flamante exsecretaria de Energía: una denuncia en su contra ante la Fiscalía Especializada en materia de Combate a la Corrupción de la Fiscalía General de la República (FGR) por enriquecimiento ilícito y operaciones con recursos de procedencia ilícita.

Desde hace tiempo, Nahle, la zacatecana procura tener bien guardados sus “trapitos” que finalmente van “saliendo al sol” porque entró a la contienda por la gubernatura veracruzana, frente a un candidato que asegura, “yo sí puedo explicar que he hecho y cuál es mi trayectoria”.

Ahí está que la señora Nahle está presuntamente relacionada en la compra de tres predios en Veracruz y Tabasco, y no estamos hablando como en el caso de la candidata de Morena al gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, que compró una casa con una módica suma: 300 pesos. Este asunto que involucra a la zacatecana que ni con calzador alcanza a ser de Veracruz, es de dimensiones mucho mayores porque la exfuncionaria morenista hubiera tenido que ahorrar todo su sueldo durante 39 años para poder alcanzar a comprar dichos predios, por lo que el candidato Yunes preguntó: ¿de dónde salieron esos recursos?, ¿por eso se disparó el predio de Dos Bocas?

Asimismo, Yunes Zorrilla planteó que el dilema en estas elecciones que se llevarán a cabo en la entidad veracruzana, es “tener un gobierno de verdad o aguantar un sexenio de mentiras”.

Por otra parte y respecto al catálogo de ineficientes gobernadores de Morena, qué casualidad tan rara, por decir lo menos se da en esta coyuntura. Resulta que cuando en su gustadísimo “stand-up” mañanero el presidente Andrés Manuel López Obrador se lanza, -entre sus muchos adversarios-, en contra del gobierno de Guanajuato, entidad que vive desde hace tiempo un clima sumamente violento, cuestionando la permanencia del Fiscal estatal, Carlos Zamarripa, para concluir que el gobernador Diego Sinhué Rodríguez “sólo gobierna, pero no manda”, y todo porque el tabasqueño se molestó ya que el mandatario estatal no siguió “el sabio consejo de buena fe” que le dio el presidente y no removió al fiscal Zamarripa.

Acto seguido y en una sola voz, tanto la candidata guinda, Claudia Sheinbaum, como el dirigente nacional de ese partido, Mario Martín Delgado, arremetieron en contra de la referida entidad por el reciente asesinato de la candidata de Morena al municipio de Celaya Gisela Gaytán, por lo que demandaron al gobierno guanajuatense y al Instituto Electoral estatal, que se indague por qué no se brindó protección a la candidata guinda.

Y en este mismo orden de ideas, ni qué decir del flamante candidato del oficialismo al Senado, Ricardo Shieffield, eterno aspirante al gobierno de ese estado, quien reprochó que autoridades electorales de Guanajuato pidieron una cantidad «impresionante y ridícula» de documentos a la hoy extinta abanderada, lo que obstaculizó que se le brindara seguridad

Ojo, no es que se quiera negar que la violencia y la inseguridad se va incrementando en todo el país, independientemente del color de partido que gobierne, pero es un hecho innegable que lo que siempre busca Morena, es defender a los gobernadores de su color, sin importar el tipo de recurso del que tengan que echar mano.

Si el presidente dice que en Guanajuato, Diego Sinhué Rodríguez “gobierna pero no manda”, ¿Qué tendría que opinar sobre Guerrero, donde Evelyn Salgado ni gobierna, menos manda y de plano no se aparece, o en el caso de Michoacán, donde Alfredo Ramírez Bedolla se limita a recomendar a los candidatos de su partido que no hagan ronda con los de la delincuencia organizada.

Desde la oposición, el coordinador de los diputados del PRI, Rubén Moreira manifestó: “yo creo que la postura del señor Presidente de la República y se lo digo con todo respeto, no es la correcta. No se trata de echar la bola uno a otro, se trata de actuar. Entonces, ¿para qué queremos a la Guardia Nacional? ¿para qué queremos que el Ejército tenga facultades como las tiene ahorita para actuar? ¿para qué queremos al Centro de Inteligencia Nacional? Pues lo queremos para evitar esto. Lo queremos para que se pongan a chambear».

MUNICIONES

*** “Una vez destituidos de su cargo nunca volverán a pertenecer a esta corporación” y solo dio motes, “el Chevy, el Chetos y el Chamín”. Esto lo dijo muy enfática e indignada ni más ni menos que la flamante gobernadora de Campeche, Layda Sansores Sanromán, en un mensaje dirigido a 9 policías estatales. Uno de estos, José Márquez habló a nombre del resto de los policías y señaló que este mensaje lo reciben como otros anteriores, todos amenazantes. Márquez desconocer exactamente a cuantos policías corrió la controvertida gobernadora, porque al momento, nadie había recibido notificación alguna. Los policías manifestantes dicen que su posición no se mueve, esto es, piden que se remueva a la secretaria de Seguridad Pública del Estado, Marcela Muñoz, es decir, que se vaya, para luego establecer el diálogo y explicó que la señora Muñoz se ha olvidado de los beneficios que deben tener los policías, mientras que “Ella (la gobernadora Sansores) sigue en su posición y nosotros en la nuestra que es no bajar la cabeza ni flaquear porque nosotros somos víctimas de este gobierno. La señora Sansores no ha sabido ofrecer una disculpa sobre todo a las mujeres que pertenecen a dicho cuerpo policial, con quienes no demostró ni un ápice de soloridad. Total que las cosas siguen calientes por aquel estado y los policías estatales han venido refrendando y que no se someterán a la tiranía que ejerce la mandataria campechana, conforme a su estilo. Eso sí, la también exsenadora se dio el lujo de tomar vacaciones con motivo de la Semana Mayor, en el fondo, con el objetivo de que los policías se desgastaran y dejaran su causa, lo que al parecer, no sucedió. Otro ejemplo de las enormes incapacidades de los gobernadores de Morena salta a la vista.

morcora@gmail.com