Del 12 de noviembre al 15 de diciembre son los tiempos de discusión que se han empezado a marcar en el Palacio Legislativo de San Lázaro para la cuestionada Reforma Energética, especialmente la Eléctrica y que curiosamente, entre otros efectos, ha terminado por poner ni más ni menos a los diputados priístas que coordina Rubén Moreira, en un dilema y con este debate se verá si los del tricolor son capaces de respetar los acuerdos y la alianza que estableció con el Bloque Opositor, o si cede a las presiones y coqueteos de Morena.
Por lo pronto, la senadora Claudia Ruiz Massieu, se dio tiempo para calificar a dicha reforma como “poco extraña”, -lo que quiera decir esta frase-, porque convierte en un monopolio a la Comisión Federal de Electricidad, que carece de la capacidad de generación de energía que demanda México.
El diputado panista Justino Arriaga, anunció la postura de su bancada y destacó que los 114 legisladores albicelestes votarán en contra porque no ven nada positivo en dicha iniciativa. “Es una imposición de Manuel Bartlett para retroceder a la década de los sesentas” y por ende, hacer de la CFE un monopolio porque se desaparecen órganos autónomos además de que se violan acuerdos en materia ambiental y tratados internacionales. No sobra decir que los monopolios estatales han sido un fracaso rotundo.
El coordinador de la bancada de Acción Nacional, Jorge Romero encabezó la conferencia de prensa en la que se puso en evidencia la alianza PAN, PRI y PRD, porque si el Revolucionario Institucional se decide y vota junto con Morena a favor de la controvertida propuesta, “estamos esperando que el PRI tome una decisión crucial para esta coalición”, dijo el diputado Arriaga, que transitó, -se supone-, de lo electoral a lo legislativo.
Aquí lo que se impone, sin duda es que el Revolucionario Institucional cumpla con los acuerdos establecidos, pero con eso de que el dirigente del PRI, Alejandro Moreno, dice una y otra vez que su bancada está analizando la propuesta…
El coordinador de la fracción parlamentaria de Morena, Ignacio Mier informó que en dos meses se estaría votando la propuesta lópezobradorísta, pero hay algo muy importante en este punto que manifestó Justino Arriaga a nombre de muchos legisladores: “yo ya no les creo nada. Estamos esperando un albazo de parte de los de Morena por eso estamos preparando un parlamento abierto, vamos a buscar a expertos en el tema para que votemos en consecuencia lo que más le conviene a la gente que no sea una reforma estatista y retrógrada”.
Por otra parte, gran expectación se ha generado por el día de mañana, cuando en el Senado de la República se entregue la Medalla “Belisario Domínguez” a la maestra Ifigenia Martínez en un merecido reconocimiento, pero también, esta máxima presea se entregará también al personal médico que en la primera línea ha combatido el Covid-19.
Se supone que quien la recibiría a nombre de dicho personal, sería ni más ni menos que el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell y desde el grupo parlamantario del PRI en la Cámara Alta, surgió la solicitud formal para que este cuestionado e incapaz subsecretario no asista a la entrega de dicha medalla.
Las razones, son evidentes, por ejemplo, no se puede olvidar la manera en que este incompetente funcionario dijo frases tan insulsas como aquella de que “el cubrebocas sirve para lo que sirve y no sirve para lo que desafortunadamente no sirve”, o bien cuando se burló del grupo de seis exsecretarios de Salud: Julio Frenk Mora, Guillermo Soberón, José Narro, Mercedes Juan, Salomón Chertorivsky y José Angel Córdova Villalobos que criticaron, bajo la iniciativa “Pensando en México” y con todo el fundamento, la gestión de esta errada y llamada cuarta transformación frente al COVID-19, e hicieron 14 propuestas para redirigir la estrategia, entre las que destaca: hacer conciencia de que la pandemia será larga.
Luego de una ironía bastante mal hecha, López Gatell descalificó la propuesta, por eso, será una aberración que la recibiera a nombre del personal médico.
MUNICIONES
*** Respecto a que el presidente López Obrador y dijo que no va al recinto de Xicoténcatl a entregar la medada “Belisario Domínguez”, el presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara Alta, Ricardo Monreal señaló: “aunque podamos pensar que López Obrador enviará como representante al secretario de Gobernación, Adán Augusto por el motivo que circula en muchas bocas, el temor a una senadora, podemos también creer que no es ‘Andrés Manuel’ quien se niega, sino que una de sus obligaciones es hacer respetar la investidura presidencial”. Monreal Ávila señaló que de cualquier manera se llevará a cabo la ceremonia de entrega de la presea a Ifigenia Martínez, a Manuel Velasco-Suárez y al sector Salud que acudirá a recibirla López Gatell, subsecretario de Salud, como comisionado a recibirla. Aunque tal vez no asista porque el Presidente ya le hizo un llamado para que no acuda a la sede del Senado.
*** A propósito, los senadores de la oposición, insisten en que el presidente se anime a acudir a Xicoténcatl mañana. El senador Mario Zamora dijo que si no le dio miedo a López Obrador encabezar una gira en Badiraguato, Sinaloa, (a ver a YSQ y a su abuelita), no tendría por qué temer asistir a la vieja sede del Senado. Aquí lo más importante es que la senadora Lilly Téllez y su hijo ya recibieron amenazas vía Internet y ya sabemos de parte de quién son, ¿o no?
*** Con el anuncio que hizo el nuevo gobernador de Nuevo León, Samuel García, respecto a que también encabezará la cuestionable práctica de ofrecer “mañaneras”, solo que éstas serán únicamente tres veces a la semana y ya hasta las bautizó como “El Nuevo León informa”, y, ¿quién será el Nuevo León, a poco el joven mandatario estatal?, porque él asegura que no ofrecerá dichas conferencias de prensa matutinas con afanes protagónicos. ¿Será? Desafortunadamente Samuel García dejó entrever que efectivamente, siempre fue el “caballo negro” del presidente López Obrador y en esa tesitura, el nuevo gobernador neoleonés por lo que se nota, está más que dispuesto a plegarse a las instrucciones que le dicten directito de Palacio Nacional y a ver en qué otras cuestiones, García Sepúlveda intenta imitar al presidente. ¡Qué mala suerte¡ Lo que sí, es que no solo en los corrillos regios, no deja de comentarse que en realidad, será su esposa, la influencer Mariana Rodríguez Cantú, la que gobernará la entidad, porque asumirá su papel de ser “el susurro detrás del trono”, pese a que rechazó ser la titular del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de las Familias, (DIF), y en cambio, ella se encargará de la coordinación de los tres gabinetes que encabeza ya su esposo.