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De pronóstico reservado el berrinche que hará todo el fin de semana ni más ni menos que el presidente Andrés Manuel López Obrador porque pudo corroborar que nada le sale bien y que sus regaños en el gustadísimo “stand-up” mañanero, son palabras y más palabras que se pierden en su propio eco.

Ayer, de nuevo, a los legisladores de Morena y sus rémoras, les fallaron las matemáticas y no alcanzaron a comprender que los seres humanos no se pueden dividir en fracciones y menos los votos de los legisladores; esto es, no puede ser eso del 23.1 votos para que mágicamente suba a 24, si no estamos en la escuela, a donde se supone que regresarán el próximo lunes quizás miles de alumnos a clases presenciales. El caso es que en la reposición de procedimiento que intentó ayer el partido oficial, les resultó imposible entender a morenistas, petistas y del PES, que las matemáticas son una ciencia exacta que no se puede politizar.

Por segunda ocasión la oposición logró con sus votos -13-, rechazar la intención de Morena de convocar a un período extraordinario para abordar lo referente a la revocación de mandato por instrucción directa y regaños provenientes de Palacio Nacional. Igual que el día anterior, les faltó a los de Morena y sus rémoras, solamente un voto y para poder conseguir un tercer período extraordinario pero para su infortunio, perdieron.

Afortunadamente y ante lo que panistas, perredistas y priístas calificaron como “las locuras de Morena”, no se quebró el Bloque de Contención y los legisladores del partido oficial, tuvieron que pasarse sin agua el amargo sabor de la derrota 

Ayer estuvieron todos, los 37 legisladores de la Permanente y ni aun así pudieron ganar. Durante las dos horas que duró el retraso para que iniciara la sesión, se comentaba en los corrillos de la Cámara Alta que sería por el lado de Movimiento Ciudadano donde saldría la fractura y que incluso ya había “línea” directa del gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, con eso de que se supone que se habría reconciliado con López Obrador, pero el coordinador de la fracción de MC en el Senado, Dante Delgado dejó  claro que iban a votar en contra para sumarse a la oposición, aunque a la hora de la votación, el veracruzano tuvo un “resbalón” y después de que el senador César Cravioto votara a favor de la realización del extraordinario, dijo que también iba en ese sentido su voto, aunque inmediatamente rectificó para decir que no, que su voto era en contra de que hubiera un tercer período extraordinario.

“Lo traicionó su instinto democrático”, le insistieron algunos legisladores morenistas, pero el senador Delgado Rannauro, no hizo caso.

De lo que se oía en los pasillos de la sede senatorial, se comentaba que la gran lección de estos intentos fallidos, es que el verdadero operador de la Revocación de Mandato es el presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara Alta, Ricardo Monreal, quien la víspera de las sesiones de la Comisión Permanente, había dicho que el tema se enredaba cada vez más y estaba muy complicado.

O sea, ni el asesor jurídico del presidente, Julio Scherer, ni su coordinador de asesores, Lázaro Cárdenas Batel y mucho menos la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, que se reunió con los legisladores del partido oficial la víspera de las sesiones, pudieron operar un asunto tan importante para Palacio Nacional. De seguro, estos tres personajes ya recibieron menudo regaño por parte de su jefe que, de nueva cuenta, busca no quien se la hizo, sino quién se la pague.

MUNICIONES

*** En el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, se registró ayer una fuerte discusión entre dos magistradas, Janine Otálora y Mónica Soto, porque la primera presentó un proyecto en el que, aprobado por unanimidad, se ordena un recuento total de votos en  la elección de la gubernatura de Campeche. Entre los motivos presentados por la magistrada Otálora, se indicó que se encontraron diversas irregularidades y que el Tribunal Electoral local no hizo caso a las quejas de Movimiento Ciudadano, mientras que por su parte, Mónica Soto se pronunció en contra de dicho recuento argumentando quea la sospecha no es suficiente para, -en este caso-, abrir todos los paquetes “por expresiones que de ninguna manera están probadas”. La diferencia entre la ganadora de dichos comicios y su más cercano seguidor, es apenas del 1.4%, algo así como 124 mil votos. Otra que hará una gran bilis, será quien fuera la candidata de Morena al gobierno campechano, Layda Sansores, que había informado que hasta tenía su constancia de mayoría. “Voto por voto, casilla por casilla”, ¿a quién recuerda esta consigna?

*** En otro tema que ocupa los dolores de cabeza del Ejecutivo, es que en la semana que está por iniciar, marcará la cuenta regresiva para que niños y adolescentes regresen a clases presenciales, la más afectada con esta situación fue, ni más ni menos que la secretaria de Educación Pública, Delfina Gómez que tuvo que “aguantar vara”, ante las descalificaciones que le hiciera en Palacio Nacional su jefe, por lo que acabó la semana descalificada, a grado tal que la funcionaria tuvo que volver a sacar la cara para decir que la causa que causó el pésimo intercambio de señalas entre el inquilino de Palacio Nacional y la señora secretaria, fue una “propuesta de carta de corresponsabilidad que ahora, “ya no existe, se elimina”. Ni hablar, ordenes son ordenes.

*** Hay que decirlo, el diputado sin fuero Benjamín Saúl Huerta, dio la exclusiva para lo de su entrega a las autoridades y aprovechó el foro para intentar hacerse la víctima porque con los ojos llorosos, veía cómo los agentes se aproximaban para llevárselo. Su error fue suponer que las violaciones a jóvenes de las que es responsable, no saldrían a la luz porque el fuero y la curul lo protegían. Ahora, con su carrera política destruida, justo como él No quería, Huerta deberá permanecer 3 meses en prisión preventiva oficiosa para lo cual, fue trasladado al Reclusorio Oriente. Una vez vinculado a proceso, el legislador por Puebla se acogió al artículo 20 constitucional y no rindió declaración, mientras sus abogados hacían lo posible por exculparlo diciendo, por ejemplo que la parte ofendida, es decir, los padres de uno de los menores abusados, hizo una petición de poco más de un millón de pesos para la reparación del daño. Bueno, de qué se queja Saúl Huerta, si una vez que su última fechoría vio la luz, se comunicó telefónicamente con la madre del menor para informarle que la compensaría económicamente y muy bien, si la familia del agraviado guardaba silencio. Ahora, el diputado morenista sin fuero asegura que va a limpiar su nombre que dizque porque es inocente. ¿Será?, porque hoy, otro menor abusado podría presentarle cargos.

morcora@gmail.com