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¿A poco, Claudia Sheinbaum?

¡Naaa!

¿De veras vas a basar tu plan de gobierno en las veinte propuestas de reforma de Andrés Manuel López Obrador?

 No te creo.

 Casi nadie se ha dado cuenta de que eres la extensión de su mandato, como los presidentes autoritarios de América Latina que juran acabar con las dictaduras y se convierten en una.

 López Obrador no se va a ir a La Chingada, su rancho en Chiapas,

como ha prometido.

  Prueba de ello son sus veinte proyectos enviados a la Cámara de Diputados, sabedor de que no pasarán -acaso la ley del salario mínimo base y de las pensiones al ciento por ciento- y que le servirán como herramienta para atacar un día sí y otro también a Xóchitl Gálvez Ruiz, la candidata de la coalición Fuerza y Corazón por México, integrada por PRI, PAN y PRD.

  Y tan lo sabe que ayer reconoció haberlas enviado en el último período legislativo de su administración… ¡porque es tiempo de elecciones y así fomenta el debate político!

SIN PERSONALIDAD NI AUTENTICIDAD

Claudia Sheinbaum es una calca de Andrés Manuel.

 Así es conocida en redes sociales donde, por cierto, tiene un ejército de bots, pagados para que la mantengan en Equis, según ellos, en el primer lugar.

 López Obrador está encantado con el poder, enamorado de la Presidencia y, en consecuencia, se reelegirá de forma indirecta mediante Sheinbaum, la que no puede decir ni pío -como decía mi mamá- y tiene que obedecer a quien le heredará la silla.

 Y no es opcional, está obligada a hacerlo, porque, además, es una de las condiciones que le puso su padrino.

  Porque el ocupante de Palacio Nacional le ha dejado bien claro que ella hará la campaña y peleará en las urnas quedarse en su lugar, pero el que piensa, el que arma y decide es él, por eso sus reformas transexenales que le quitan toda la libertad a ella de, en caso de ganar, decidir qué quiere y qué no.

EL ENGAÑO CON LAS REFORMAS

Ayer se lo dije y lo reitero: una mentira, una farsa, esa de que los trabajadores, tooodos, se retirarían con el ciento por ciento de su último salario, como pensión.

  Otra mentira, otra falacia del embustero: la pensión sólo sería para quienes no pasen 17 mil pesos mensuales de ingresos.

  El resto, tal como se encuentra en estos momentos.

  Puro guaraguara, decía mi abuelo.

Vámonos: ¿Pues no que el inglés no importa?

  Hace seis años, los fanáticos de López Obrador aseguraban que no era importante, que su ídolo era único, que hablar hasta el español o castellano mal, lo hacía atractivo.

  Hoy, esos hipócritas con disfunción cerebral, critican a Xóchitl Gálvez por su pronunciación del inglés, durante su visita a Estados Unidos.

  Y dicen que los migrantes la repudiaron.

  Tienen razón: migrantes que tienen años viviendo allá y que son militantes de Morena.

 

   alberto.montoya@diahabil.com.mx      @albermontmex