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El Presidente Andrés Manuel López tenía prisa para abandonar sus oficinas de Palacio Nacional, no quería dejar una semana más sin hacer proselitismo, sin dejar de hacer campaña política, como lo viene haciendo desde hace casi 20 años. Desde la noche del viernes ya estaba en Chiapas, en su rancho.

De ahí se trasladó a Cancún en donde dará el banderazo de salida para iniciar las obras del tren Maya, aunque todavía hay procesos judiciales que se están dirimiendo en los tribunales.

El problema es que ya le anda al mandatario por irse de gira, pues teme perder lo que prácticamente se ha convertido en su único activo, hacer el papel de candidato, sobre todo ahora que esta enfermedad ha tenido la virtud de colocar su popularidad hacia la baja.

De ahí que rechace cualquier cifra que le marque lo contrario, es decir, que nuestro país, que de por sí estaba metido en una grave crisis gracias a los “loables” esfuerzos de la llamada cuarta transformación, se recrudeció por esta pandemia, aunque la justificación de tanto error de la actual transformación, es que eso está ocurriendo en todo el mundo, lo que por cierto no deja de ser cierto pero solo en cierto grado.

Será una gira de casi una semana, visitando los estados en donde el coronavirus está contagiando en forma alarmante, dende supuestamente las reuniones o mítines no serán de más de 50 personas, a menos de que sus adversarios le envíen grandes contingentes, pero ello será responsable de los “científicos” de  los fifis.

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Circo VS. Diálogo abierto

Sería lamentable que perdiéramos el sano ejercicio de rendición de cuentas o dialogo abierto al que ya nos habituábamos entre senadores de la república con funcionarios de alto nivel del actual gobierno.

El encuentro abierto a través de las redes sociales y el mismo canal del Congreso resultaba no sólo interesante, sino esclarecedor del por qué y el para qué de la instrumentación de diversas políticas públicas.

Vimos, así, al responsable de la política exterior, Marcelo Ebrard, quien explicó a detalle los acuerdos logrados con los Estados Unidos, China y la Unión Europea para hacernos de equipo e insumos para combatir a la pandemia, como los escenarios por venir una vez que se reinicie la apertura de diversas actividades económicas.

También participó ante los integrantes de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), que integran todos los líderes de las diversas bancadas, el titular de la Seguridad Pública, Alfonso Durazo, quien dio a conocer el desarrollo en la formación de la Guardia Nacional y el retiro paulatino de los elementos de las fuerzas castrenses de este cuerpo policiaco.

Todo marchaba bien, pues si bien había cuestionamientos, hasta de la misma bancada de Morena, fuertes y a fondo, nadie se mostraba grosero, altanero o hasta insultante. La propuesta de Ricardo Monreal, presidente de la Jucopo y líder de la bancada de Morena, se integrantes de diversas comisiones.

A través de los monitores de televisión se podía observar como se sumaban cada sesión, más y más legisladores al dialogo abierto y sin restricciones con funcionarios públicos. En diálogo entre dos poderes que buscan los equilibrios y los mejores acuerdos en bien de la Nación. El Legislativo que cuestiona en nombre del pueblo, el Ejecutivo que responde de su accionar.

La expectativa llegó a su punto máximo con el anuncio de la reunión de trabajo –insisto, que no comparecencia—de Hugo López Gatell, subsecretario de Salud y los y las legisladoras, a la reunión se sumaron más de 50 senadores, cuando el promedio había sido de 30. La expectativa era alta, muy alta.

Cómo en todos correspondió a Monreal Ávila dar la bienvenida, hacer las presentaciones y abrir con la primera ronda de preguntas, cabe decir que eran críticas, pero en un tono respetuoso. Duro en el cuestionamiento, amable en planteamiento. De igual manera se mostraba la presidenta de la mesa directiva del Senado, Mónica Fernández Balboa.

Pero llegó el choque y desencuentro de la senadora de Acción Nacional, Alejandra Reynoso tomó la palabra  fundamento y acusó al funcionario de mentiroso y traidor a los mexicanos, sin piedad se le quiso ir a la yugular.

Hugo López Gatell escuchó atento y anotó en su libreta. La respuesta fue implacable y demoledora, pues le hizo ver que no atendía y por lo tanto no comprendía. Le explicó así que existe “en la fisiología humana una serie de funciones, las funciones mentales superiores, y la atención aparece generalmente al principio de la lista, no sólo porque empieza con A, sino porque del funcionamiento de la atención derivan la efectividad del desarrollo de las otras funciones”.

Para los panistas eso fue una declaración de guerra, que trataron de reavivar ayer, al finalizar la reunión de Trabajo con el presidente del Banco de México, Alejandro Díaz de León, quien por cierto se fue aplaudido por todos los legisladores.

Pero el daño ya estaba echo, y la genial idea de Monreal ha quedado en el limbo, pues la misma bancada de Morena ha pedido, en voz del senador Alejandro Armenta, se suspendan estas, a falta de garantías de respeto y buena conducción.

Se entiende el desánimo y dolor de Monreal Ávila, quien dijo respetará la decisión de sus colegionarios, pues trabajó mucho para que estas reuniones de trabajo se llevaran al cabo. Negoció y acordó con funcionarios públicos e integrantes de las bancadas afines y opositoras. Y todo se derrumba por las ganas de confrontar y tratar de atropellar por parte de quienes no gustan del debate civilizado y razonado.

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El PRD exige a la Comisión Permanente del Congreso de la Unión cite a comparecer a la Secretaria de Energía, Rocío Nahle para que explique un contrato de más de 4 mil millones de pesos a su compadre Arturo Quintanilla Hayek, acto que hizo sin licitación.

Se dio a conocer que la funcionaria otorgó al Grupo Huerta Madre, propiedad del empresario veracruzano, un contrato millonario para trabajar en el acondicionamiento de los terrenos para la refinería de Dos Bocas, lo cual incurre en un acto de corrupción y conflicto de interés, pues desde 2018 se sabe de la cercana relación que hay con el empresario.

En ese sentido, el dirigente nacional Ángel Ávila Romero enfatizó que el actual Gobierno Federal es más de lo mismo que hicieron los gobiernos del PRI y el PAN, pues la corrupción y el nepotismo están a la vuelta de la esquina y en cada instancia de gobierno.

Cuestiona la falta de transparencia para otorgar un negocio tan rentable, pues pareciera que el compadre de Rocío Nahle tendría información privilegiada para ofertar el mejor precio y se le pudo haber otorgado asesoría desde la propia Secretaría de Energía para conseguir tan jugoso negocio.

ubaldodiazmartin@hotmail.com

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