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Al interior de Palacio Nacional se sabe que el presidente Andrés Manuel López Obrador estaría más que molesto con los resultados que le ha entregado la secretaria de Energía, Rocío Nahle García en torno a la construcción de la Refinería Olmeca en Dos Bocas, Tabasco.

Resulta que tras haber inaugurado dos veces la tan ansiada obra de la 4T la planta todavía no arranca. Las razones pueden ser varias, pero lo que más molestaría al jefe del ejecutivo es que en distintas ocasiones ha confrontado a Nahle para preguntarle cómo van los trabajos y la respuesta es siempre la misma: la obra quedará en los tiempos acordados.

La realidad es que el tiempo no ha sido el mejor aliado de la titular de Energía ya que originalmente la refinería iba a entrar en operación en 2021, ahora se dijo que será hasta noviembre próximo, pero la mega obra está lejos de satisfacer al mandatario, quien pretende la autosuficiencia energética.

Nos cuentan que el presidente y todos los involucrados en la obra, como el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, entre otros, se habrían enterado que Nahle contrató en Dos Bocas a un empresario que sería íntimo amigo de Miguel Ángel Osorio Chong, lo cual explicaría los distintos retrasos.

En los pasillos palaciegos suena el nombre de Juan Carlos Tapia Vargas, dueño de Construcciones Industriales Tapia (Citapia), quien le organizó varias reuniones presidenciales a José Antonio Meade

Cercano al gobierno y diversos encargos del ex secretario de Gobernación, Tapia Vargas se involucró al esquema de corrupción entre Emilio Lozoya Austin y Odebrecht, asunto que en 2019 derivaría en una inhabilitación. Además, fue acusado de huachicol. En 2017, la entonces Procuraduría General de la República inició una investigación en su contra por robo combustible del poliducto Tula-Salamanca propiedad de Petróleos Mexicanos, de acuerdo con la carpeta FED/HGO/TULA/0000397/2017.

Pese a todo, este oscuro personaje, vía otras empresas, obtuvo al menos seis contratos en la Refinería Olmeca, en Dos Bocas, Tabasco.

En el megaproyecto energético el empresario hidalguense participa con razones sociales nuevas, y otras que ya estaban creadas, pero a las que se les cambió el nombre, cuyos accionistas son el mismo Juan Carlos Tapia, familiares u otros asociados. Le hablo de Mexicana de Recipientes a Presión, que cambió su nombre a Procesos Especializados y Proyectos (Proesa); Manufactura Especial y Proyectos Industriales (Mepi); además de Procura y Proyectos Oil & Gas y; Grupo Constructor Industrial Oil & Gas. Todo con la complicidad y protección de la funcionaria federal.

La ruta del dinero

La sorpresa del primer sondeo del Frente Amplio por México fue sin duda la buena aceptación que logró Beatriz Paredes Rangel como eventual candidata a la contienda presidencial de 2024. Llamó la atención en particular la encuesta levantada en casas donde la priísta logró 29 por ciento contra el 32 por ciento de Xóchitl Gálvez. Se trata de una diferencia mínima si pondera que las consultas en viviendas tienen un peso relevante a pocas semanas de la definición final.