Compartir

Prácticamente el mundo, ha condenado el reciente asalto a la embajada de México en Quito, Ecuador. Incluso ayer mismo, el presidente Andrés Manuel López Obrador y su homónimo boliviano, Luis Alberto Arce, conversaron vía telefónica en la que se supone que esta último se solidarizó con el tabasqueño respecto a dicho incidente.

Para hoy, el presidente Arce convocó a su Embajadora en Ecuador, Segundina Flores con el objetivo de obtener más información sobre los hechos registrados el pasado viernes, que derivaron en la detención del exvicepresidente de Ecuador y asilado político, Jorge Glas, al que esta errada y llamada cuarta transformación, ojo, ve aun como asilado político y en la ruptura de relaciones entre México y Ecuador.

Vale la pena destacar que Ecuador –independiente de lo ocurrido el fin de semana en dicha nación-, es uno de los países que se suma a la lista de los que se han enfrentado a López Obrador, que tiene un concepto sobre soberanía muy especial en el que la norma es que él interviene en la vida de otros países pero, eso sí, no permite lo contrario, o ea, la ley del embudo. Habrá que ver qué pasa en este conflicto.

Por lo pronto, la presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Marcela Guerra Castillo, afirmó que la Embajada de México en Quito, Ecuador, es territorio mexicano y por ello, reiteró la condena ante esta violación y falta de respeto. Y efectivamente así es.

“Esto es una violación al derecho internacional, a la soberanía del territorio Nacional; constituye una acción inadmisible que crea un ambiente de enfrentamiento, vulnera el derecho de asilo y atenta contra el espíritu de hermandad, solidaridad y respeto mutuo que durante décadas han marcado las relaciones entre los países de nuestro Continente.

“Representa una grave violación a la Convención de Viena Sobre Relaciones Consulares que en su Artículo 22 dice: “los agentes del Estado receptor no podrán penetrar en ellos sin consentimiento del jefe de la misión. El Estado receptor tiene la obligación especial de adoptar todas las medidas adecuadas para proteger las instalaciones de la misión contra toda intrusión o daño y evitar que se turbe la tranquilidad de la misión o se atente contra su dignidad”, apuntó. 

La voz de la diputada Guerra Castillo, se suma a otras que se han dado a nivel mundial al asegurar que: “Por convicción creo en la resolución pacífica de cualquier diferencia a través del diálogo y la diplomacia y hoy más que nunca la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) deben sesionar para recuperar el respeto y la fraternidad entre los pueblos latinoamericanos.

Al momento de escribir estas líneas las candidatas presidenciales de la coalición, “Fuerza y Corazón por México”, Xóchitl Gálvez y de “Sigamos Haciendo Historia”, Claudia Sheinbaum, marcaban la línea de que el debate, sería básicamente de contrastes, pues mientras la exjefa de Gobierno de la Ciudad de México, prometió que hablaría de casos embarazosos para ella como el derrumbe del Colegio “Enrique Rébsamen” y la tragedia de la Línea 12 del Metro, Gálvez Ruiz decía no espantarse de la guerra que ha emprendido el oficialismo en su contra

Sin embargo y a reserva de ahondar más en este tema, hay que destacar que la historia nos ilustra a que tanto presidentes como candidatos, se han visto más que rodeados, cercados por gente de comunicación social que más que hacerles un beneficio, dañan su trayectoria porque no les permite ver hacia afuera y ello implica que los intentos de este tipo de gente son para que el candidato o el presidente, no vean la realidad, lo que es imperante sobre todo en la coyuntura electoral.

Esto tal parece que ocurre en la campaña de Xóchitl Gálvez, quien el sábado llegó a las instalaciones del INE acompañada, entre otros, por su vocero Max Cortázar, exbaterista del conocido Grupo Timbiriche y que durante la gestión de Felipe Calderón, se desempeñó al frente del área de Comunicación Social y desafortunadamente, ha venido colocando un cerco alrededor de Gálvez Ruiz, que por cierto, en torno al conflicto que vive México con Ecuador, se solidarizó con la postura de López Obrador.

Y si bien es cierto que como dice por sus redes sociales el señor Cortázar: “la 4T no sabe hacer otra cosa que no sea culpar a los demás de sus propios errores”, en la operación de comunicación social en la oposición, habría que hacer ajustes, más aún porque aún falta tiempo para que las campañas terminen. Hay aportes provenientes de los partidos que conforman dicha coalición que son muy dignos de tomar en cuenta y no es poniendo cercos como se haga una campaña.

MUNICIONES

*** luego de que el INE cambió en Coahuila el orden de los candidatos por cuestiones de paridad de género, Luis Fernando Salazar Fernández, aspirante de Morena al Senado de la República, aseguró primero que “no importa ir en primer o segundo lugar de la fórmula”, inmediatamente cayó en contradicciones porque ahora resulta que el morenista presentó un juicio para litigar el primer sitio en la fórmula para el Senado. Pues ¿no que no le importaba y que lo trascendente era ganarle al exgobernador del estado Miguel Riquelme? El primer lugar de dicha fórmula se lo dio el INE a Cecilia Guadiana en cumplimiento del principio de paridad de género. Esto le incomodó sobremanera a Salazar Fernández, quien señaló: “Nunca me he planteado llegar al Senado perdiendo…  no se qué vayan a resolver, pero decirte que lo que sea, yo estoy bien”. Agrega el candidato que fue su partido, Morena, el que inició una inconformidad, y que a él solo le quedó acatarse a la decisión de colocar a una mujer en primer lugar de la fórmula. ¿Será?

*** No dejó de llamar poderosamente la atención que la candidata guinda, no acudiera el sábado al ensayo del debate. Con esto, la señora Sheinbaum de Tarriba asumió actitudes iguales a su jefe máximo, cuando éste fue candidato presidencial en el 2018. De igual modo se desenvolvió en el debate al estilo lópezobradorista más puro y encima y como siempre, justificándolo. ¡Qué tal! Por cierto, el candidato presidencial “patiño”, Jorge Alvarez Maynez, llegó ronco al ensayo, pero “ni fu ni fa” porque ni caso le hicieron en el debate, simple y llanamente, ni lo pelaron.

morcora@gmail.com