Cuando en México estamos a punto de entrar en la fase 3 de la pandemia del Covid-19, el partido en el poder, Morena, prepara otro fast-track para aprobar prácticamente sobre las rodillas que el presidente Andrés Manuel López Obrador pueda ejercer el Presupuesto a placer y como mejor le venga en gana, -o sea, con la víscera-, en esta época tan difícil de emergencia sanitaria y cuando es “pan de todos los días”, las quejas en diferentes hospitales, del IMSS, ISSSTE y Salud Pública, por falta de material para combatir este terrible mal, que además, ha generado nosocomios ya sin cabida para un enfermo más y de manera contrastante, el Ejecutivo aseguró que ya “domó” la epidemia.
Y en esta intentona, tal parece que la oposición en el Legislativo, será sometida a su “prueba de fuego”, con todo y que para aprobar dicha iniciativa presidencial, no se requiere la mayoría calificada y como en épocas pasadas que tanto critica el tabasqueño, ahora los legisladores morenistas están completamente supeditados a la voluntad de su jefe.
Senadores panistas como Erandi Bermúdez Méndez advirtió algo que cada vez más ven; que el presidente López Obrador se está aprovechando de la emergencia sanitaria por el Covid-19 para desmantelar a las instituciones mexicanas y construir un proyecto de país autoritario.
Específicamente el senador Bermúdez subrayó que con razón el mandatario decía que la pandemia del coronavirus le venía “como anillo al dedo” ya que al fin consiguió “generar esta tormenta perfecta para que el día de mañana él pueda tener el control total de todo, para que mañana no haya nadie que pueda ponerse en contra de él”, sin duda un sueño largamente acariciado por quien hizo una campaña de 18 años.
Por su parte, el senador de Movimiento Ciudadano, Samuel García, subrayó que la iniciativa presidencial viola cuatro artículos de la Constitución. El 126, que tiene que ver con que no podrá hacerse pagos no comprendidos en el Presupuesto; el 49 sobre la división de Poderes, pues el Ejecutivo quiere adjudicarse decisiones que solo corresponderían al Legislativo; el 74, referente a la facultad de fiscalización exclusiva de los diputados y el 134, sobre los recursos a disposición de la Federación, Estados y Municipios.
También el senador Samuel García hizo una advertencia: «No puede el presidente usurpar y robarse la tarea del Presupuesto, que es del Poder Legislativo. Lo que no se analizó, discutió o votó el año pasado, presidente, no lo puede gastar, sería un delito de peculado, de traición a la patria, si lo hace procederemos en consecuencia”.
«Si (el presidente) cambia algo se considera partida secreta, también es delito. Y el más grave, si esta iniciativa pasa no habrá fiscalización y todo el dinero que hoy se está llevando de nuestros impuestos los gastará sin escrutinio, sin fiscalización y en su caso sanción».
Y como esta iniciativa tiene que ver también con la Cámara de Diputados, el coordinador de la bancada del PRI en San Lázaro, René Juárez Cisneros, pidió que su fracción parlamentaria pueda “expresar lo que creemos, pueden ser argumentos, elementos, aportaciones, propuestas y reflexiones que sirvan para ayudar precisamente a hacerle frente a esta crisis. Ese es el ánimo que nosotros tenemos.
Y creo que coincidiendo también con lo que se ha planteado con algunos coordinadores parlamentarios, hay que cuidar que no se trastoque, que no se vulnere, que no se lastimen las funciones fundamentales de la Cámara de Diputados”.
No deja de llamar la atención la actitud del coordinador priísta. Está bien que su bancada ya perdió cualquier margen de maniobra en un espacio donde antes fue muy poderosa, pero eso ya quedó atrás y ahora sería muy recomendable que tuvieran una actitud más contundente.
Y esta actitud que le está haciendo tanta falta a los legisladores del Revolucionario Institucional, que tal parece, están sometidos a los designios de las bancada de Morena en el Legislativo, el único que la ha tenido, perteneciente a la fracción parlamentaria que tiene el control, es Porfirio Muñoz Ledo, que desde hace algún buen tiempo, ha hecho manifiestas sus diferencias con las decisiones, tanto de su bancada, que en San Lázaro coordina Mario Martín Delgado.
Vale decir que lo más seguro es que al presidente López Obrador, no le han gustado “los moditos” del integrante de la Mesa de Decanos en el Palacio Legislativo de San Lázaro, que con fundamento, ha cuestionado severamente las decisiones presidenciales, por ejemplo en cuanto a la actitud sumisa que tiene el gobierno de la llamada cuarta transformación con el de Donald Trump.
Ahora, con esta nueva intención del tabasqueño, Muñoz Ledo también ha puesto “el dedo en la llaga” lo que, como se señaló, no le ha parecido nada al presidente, así que lo más probable es que a la menor oportunidad, puede que llegue al grado de expulsarlo de las filas del partido, pero eso sería lo de menos para Muñoz Ledo.
MUNICIONES
*** Sin duda alguna, San Luis Potosí se ha convertido en territorio donde reina la inseguridad. El colmo ha llegado porque se ha incrementado de manera sumamente considerable la violencia, la ola de asaltos a restaurantes y comercios. Y desafortunadamente, ahora es noticia de todos los días de primera plana por el robo de pruebas de Covid-19, ni más ni menos que del Laboratorio Estatal de Salud Pública. Con una gran facilidad, fueron sustraídas del lugar donde se resguardan estas importantes pruebas, y con la misma impunidad él o los maleantes cometieron el delito y se alejaron sin que hubiera autoridad ninguna en el laboratorio o en las calles que pudieran percatarse de este hecho. Hay que recordar que la capital de San Luis Potosí, fue ubicada entre las 10 más peligrosas del país, de acuerdo a la reciente Encuesta Nacional de Seguridad Pública (ENSU), por encima de Reynosa, Tijuana y Ciudad Juárez. Por su parte, el alcalde Xavier Nava, en una actitud muy cómoda, sigue guardando su saña distancia y confinamiento a los problemas, además de estar envuelto en un escándalo por la compra de luminarias a sobrecosto. La pregunta es: ¿quién ayuda a los potosinos?