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Todo se está cayendo, todo se está paralizando y el temor se generaliza cada día más y más, no solo en México. A riesgo de parecer monotemáticos, ayer, el dólar alcanzó su máximo histórico  con 23.28 pesos, mientras que en cuanto al petróleo, la mezcla mexicana cayó a 18.78 dólares por barril, esto es, hace  18 años, el precio de la mezcla mexicana estaba en esos niveles y por ende, ello implica drásticas consecuencias.

Haciendo sus propios cálculos los especialistas en temas económicos hicieron cálculos nada halagüeños ya que un litro de petróleo cuesta, con estos niveles a la baja, dos pesos con 60 centavos, lo que nos coloca en el umbral de una recesión a nivel mundial que derivará, entre otros efectos, en una baja en la demanda de petróleo, gasolina y sus derivados.

Lo anterior, debería de ser motivo suficiente de preocupación ni más ni menos que para el presidente Andrés Manuel López Obrador, que en los últimos días se dio el lujo de burlarse de una pandemia mundial y reducirla a que es un recurso, única y exclusivamente para que sus enemigos y detractores lo cuestionen. Con eso de que el tabasqueño tiene –de acuerdo a su nuevo “fan”, el subsecretario Hugo López Gatell-, tanta, pero tanta fuerza moral y sería mejor que el Ejecutivo se viera infectado de Covid-19, pues todo puede esperarse de esta llamada cuarta transformación.

Sin duda alguna, es hora de decisiones sensatas, sin embargo, no parece ser el tabasqueño el más indicado para tomarlas con todo y que es el presidente de la República; una máxima responsabilidad para la que, cada día es más evidente, no estaba preparado.

No obstante, ayer, al filo de las siete de la noche, López Obrador convocó absolutamente a todos los miembros de su gabinete, -legal y ampliado-, a una reunión para analizar “temas prioritarios”, se dijo oficialmente, y desde luego, estaba contemplado el coronavirus.

Vale señalar que la situación en México, con respecto al Covid-19 es confusa y se espera que será pronto cuando llegará lo que los especialistas llaman el “pico epidémico” y habrá saturación de camas y en el área de Urgencias de diversos hospitales, por lo que lo más aconsejable es resguardarse

Lo anterior, sin duda, contrasta con medidas que se han tomado en Europa. Por ejemplo, el presidente de España, Pedro Sánchez, anunció que 20 por ciento del PIB será destinado para atender la emergencia, lo que significa la mayor movilización de recursos en ese país y mientras aquí en México, el tabasqueño se obstina en practicar el austericidio y ahorros mal entendidos, mientras que Francia se autoimpuso las medidas más restrictivas y la regla general es quedarse en casa. Desde la Segunda Guerra Mundial, en la nación gala no se habían tomado tan drásticas medidas, y aquí en México, el presidente está más preocupado en continuar con sus giras y necedades y anunció que encabezará eventos, -eso sí, con menos gente-, el 18 y 21 de marzo; el primero, el aniversario de la Expropiación Petrolera y el segundo, el natalicio de Benito Juárez.

¿Cuánto va a durar dicha recesión mundial?, esa es la pregunta central y dependerá de las medidas que cada país tome, así que ya nos podremos imaginar los mexicanos como nos va a ir. De cualquier modo, hay quienes dicen que esta crisis que tiene como factor principal el coronavirus, podría ser de seis meses o bien, llegar peligrosamente hasta el año y medio y que el peor momento se registraría entre el segundo y tercer trimestre de este año y la recuperación vendría después, eso sí, muy lenta.

Entre otras consecuencias que ya causan temor, se registrará caída del empleo, los consumidores tendrán menos dinero porque habrá menos cobros de impuestos y es aquí donde habría que preguntarnos: ¿Se caerán el Tren Maya, el Aeropuerto de Santa Lucía y la Refinería de Dos Bocas? Las apuestas ya se corren, es lo más probable

MUNICIONES

*** Será hasta hoy cuando se decida si se suspende el trabajo legislativo en el Senado de la República. Ayer, por espacio de cuatro horas, el subsecretario de Salud, Hugo López Gatell se reunió con el presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Senado de la República, Ricardo Monreal, quien advirtió que el coronavirus “estará con nosotros (en México) hasta por lo menos cuatro meses y medio, y serán inevitables las aplicaciones de las fases dos y tres”. Empero, señaló que el país no se puede quedar sin parlamento, pese a la crisis, “sería una omisión grave quedarnos sin parlamento”, remató. El legislador zacatecano y líder de la bancada de Morena explicó además que por lo dicho por el subsecretario de Salud, se espera que la implementación de la fase dos sea para la segunda semana de abril, en tanto que la tres sería hasta junio. De tal manera que la suspensión de sesiones en la Cámara Alta se daría durante el inicio de la fase dos, que es cuando la infección es más propensa a propagarse. Por el momento no se ha decidido poner fin a las sesiones y estas seguirán. Monreal consideró que será en la fase dos, donde habrá centenas de infectados por el coronavirus, cuando estemos en proximidad de suspender las sesiones.

*** Sobre las tareas legislativas, Monreal explicó que solo hay dos opciones: una que apunta a la autorización bicameral, para que se deje de sesionar tres días seguidos y realizar sesiones el cuarto día y la otra que se adelante el fin del periodo ordinario para que entre en funciones la Comisión Permanente, la cual no tiene facultades de legislar. Eso es lo que discuten la JUCOPO y la Mesa Directiva y que en la sesión de hoy se determinará en el pleno. Agregó el legislador zacatecano que si bien la reunión con el funcionario responsable de contener y reducir los daños a la población por esta pandemia mundial, fue ríspida y por momentos acalorada, ningún legislador opositor planteó su renuncia, aunque si lo urgieron a acelerar la implementación de las fases. Aunque no dejó de reconocer que a lo largo de lo que va de la crisis sanitaria si se han presentado errores u omisiones de comunicación que deben corregirse al interior del Consejo de Salud. Las medidas que adoptará el Senado de la República –concluyó Monreal Ávila—serán llevadas mañana miércoles al pleno: “La postura que adoptemos es clave, porque el Poder legislativo no puede estar ausente en tiempos de crisis. El país no se puede quedar sin parlamento, porque entonces ¿quién toma las medidas en tiempos de crisis? Sería una omisión grave.

morcora@gmail.com