Semana nueva, escándalo nuevo para el presidente Andrés Manuel López Obrador. Así, a la espera de que en cualquier momento salga a la luz otro probable huracán, esta vez de su hijo Andy López Beltrán, que por lo que se sabe, es quien pone y quita funcionarios en esta llamada y errada cuarta transformación, a la vez que decide todo en Morena, ahora, “la liebre saltó” por donde nadie se lo esperaba.
Y es que la denuncia que hizo pública el abogado Juan Collado, ya le puso “los pelos de punta”, no solo al exconsejero jurídico de la presidencia de la República, Julio Scherer, porque se trata de una madeja que tiene muchísimas vueltas y otros nombres de cercanos del presidente, podrían salir a relucir en el corto plazo. Con razón el presidente ya está harto.
¿Será por eso que de manera un tanto cuanto intempestiva, hace ya varios meses, el señor Scherer dejó la titularidad del equipo jurídico cercano al tabasqueño? Esa es una duda que empezará a disiparse, a lo mejor, en estos días que vienen.
De acuerdo a un conocido y reconocido diario que el de Tepetitán considera un pasquín, -nada más errado-, desde la cárcel, Juan Collado denunció ante la Fiscalía General de la República al ex consejero Scherer Ibarra, a tres abogados y un operador financiero presuntamente vinculados al ex funcionario, por extorsión, asociación delictuosa, lavado y tráfico de influencias.
Así, es de esperarse que el inquilino de Palacio Nacional truene por enésima ocasión en la mañanera, pues es definitivo que no sale de un escándalo, cuando “hasta el cuello”, ya está metido en otro y por ahí se avizoran secuelas de otro tipo de vínculos que podría tener el tabasqueño, por ejemplo, la visita que de manera privada realizó a Sinaloa y Nayarit, que le vino “como anillo al dedo” porque en tierras sinaloenses, pudo haber tenido la oportunidad de saludar a la madre de Joaquín “el Chapo” Guzmán y preguntarle por su nieto Ovidio Guzmán.
Por otra parte, llama poderosamente la atención que en una breve entrevista durante su estancia en Sinaloa, donde por cierto el gobernador Rubén Rocha Moya no se cansó de elogiarlo y agradecerle por las “exbenditas redes”, López Obrador pidiera “que haya más democracia y que se instalen más casillas”, esto, en referencia al inútil ejercicio de la revocación de mandato a realizarse el próximo 10 de abril.
Aquí habría que subrayar que es culpa del propio presidente que el Instituto Nacional Electoral, (INE), no hubiera recibido los recursos necesarios para llevar a cabo dicha consulta y para corroborarlo, baste con recordar el más reciente estudio de la Dirección de Finanzas del Instituto Belisario Domínguez, (IBD), en el que se consigna que en el ejercicio fiscal del presente año, los órganos autónomos tendrán un recorte de 7 mil 913 millones de pesos, de los cuales 4 mil 913 millones de pesos corresponden al INE, mientras que 3 mil millones de pesos al Poder Judicial, monto que fue reasignado a los ramos administrativos.
Fue el propio Ejecutivo el encargado de bloquear, por “línea directa” a sus subalternos, como por ejemplo, al secretario de Hacienda y Crédito Público, Rogelio Ramírez de la O, para que no entregara ni un centavo más para la realización de un ejercicio por demás aberrante, que representa todo un desperdicio de recursos, más aún, en tiempos de pandemia de Covid-19.
Por si lo anterior fuera poco, los militantes del partido oficial, se han encargado de inducir el voto pintando bardas con leyendas como: “amor con amor se paga, apoyemos a AMLO”, o, “si, si, si, que siga López Obrador”. Seguirle el juego a este tipo de maniobras, en el mejor de los casos, sería absurdo.
La pregunta que merodea la víspera de ese domingo 10 de abril, es cuántos de sus seguidores participarán, porque si nos atenemos al evento al que convocaron sus huestes más recalcitrantes en el Zócalo de la Ciudad de México, el fracaso puede pronosticarse desde ahorita.
Apenas 200 personas acudieron a la plaza principal de la capital de la República para apoyar a su amado líder, entonces, ¿dónde están los millones que se supone estarían presentes frente a un amurallado Palacio Nacional? , ¿de veras pensarán los de Morena que van a alcanzar el tan ansiado 40 por ciento para que dicha consulta sea vinculatoria?
Pero como justificación de las poquísimas personas que se reunieron en el Zócalo, se supone que los “miles” de seguidores de AMLO prefirieron congregarse ni más ni menos que en el Monumento a la Revolución donde, ojo, solo estuvo una corriente del morenismo como Bertha Luján, Saúl Castañón y Emilio Villar, o sea, la élite del partido oficial les regaló su ausencia a quienes propusieron presionar para que finalmente sea aprobada la controvertida Reforma Eléctrica del presidente López Obrador.
Una muestra más pudo observarse ayer entonces, de las profundas divisiones que tiene Morena y que no terminarán.
MUNICIONES
*** ¿No será acaso muy arriesgado que el gobierno de Samuel García en Nuevo León haya anunciado, así nada más por decreto, el fin de la cuarta ola de la pandemia de Covid-19? Alma Rosa Marroquín, secretaria de Salud estatal, fue la encargada de dar a conocer la apertura total y aforos de 100 por ciento en establecimientos, espacios abiertos y cerrados, porque se supone que se registró una reducción del 96 por ciento, respecto al pico más alto de esta cuarta ola. ¿Será?
*** Y mientras la comprometida jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum continuaba con su pasarela en la carrera por el 2024 por Baja California, en calles de la colonia Del Valle, en la alcaldía Benito Juárez, cuyo titular es Santiago Taboada, asesinaron en un supuesto asalto al director de cine Samuel Ríos Yvalles y como siempre la Fiscalía capitalina, a cargo de Ernestina Godoy, actuando un paso adelante, ya se abrió la carpeta de investigación por homicidio doloso.
*** Lo más grave y preocupante, es iniciar una nueva semana con la amenaza de guerra por el conflicto que se vive entre Ucrania y Rusia. El mundo espera que las sanciones aplicadas a la nación rusa y al delirante presidente Vladimir Putin, funcionen para revertir esta amenaza bélica. Ojalá que los acuerdos prosperen, como el que anunció el Presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, que entablará conversaciones con Moscú «sin condiciones previas». Qué desafortunado que Vladimir Putin haya aumentado las tensiones al poner en alerta a sus fuerzas nucleares.