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Cosas de la vida: la industria nacional e internacional representada en la Asociación Mexicana de Laboratorios Farmacéuticos que dirige Juan de Villa Franca y la Cámara Nacional de la Industria Farmacéutica que dirige Rafael Gual, tras ser señalada reiteradamente de “corrupta”, fue invitada por el representante en México de la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos  (UNOPS), Fernando Cotrim y por el secretario de salud, Jorge Alcocer, a participar en la licitación internacional quinquenal de medicamentos genéricos por 6,025 millones de dólares.

Es positivo que la UNOPS y que la Secretaría de Saluds muestren tal apertura hacia laboratorios así como a los distribuidores agrupados en Dilameg, que preside Víctor Soto, para surtir 3,643 clavesmédicas. Una apertura que también parece responder a la prudencia que por adelantado busca la organización que encabeza Grete Faremo pues será el proyecto más grande de su historia con una complejidad que no ha experimentado… pero por el cual cobrará al gobierno mexicano 110 millones de dólares o sea la misma cantidad que adeuda el ISSSTE, a cargo de Luis Antonio Ramírez, a sus proveedores de medicamentos.

La UNOPS cargará con un enorme fardo de tareas (24 de 32) que van desde elaborar los términos de referencia, preparar las especificaciones técnicas, hacer investigaciones de mercado, recibir ofertas, recibir y hacer los pagos por adelantado y entregar los productos al INSABI, de Juan Ferrer, el cual todavía, por cierto aún no tiene ni reglamento de operación. Pero ojo, las compras empezarán hasta 2021 (por 1,507 millones de dólares), lo que tenderá a agudizar la escasez que ya reporta el sistema público de salud.

Así, la participación UNOPS demuestra que fracasaron las dos Compras Consolidadas que realizó la Oficialía Mayor de Hacienda a cargo de Thalía Lagunes… y que la UNOPS invita a los laboratorios en México porque sabe que no puede sola con la chamba.

Calidad con Calidez

Quien toma en serio los trabajos a favor de las comunidades donde se desempeña es Cotemar de Mario Dávila: a través de sus dos Unidades Móviles, su filial Lifting De México ofreció gratuitamente servicios médicos especializados y dentales a la población de Martínez de la Torre y de Moloacán que resultaron en una mejora de los servicios de salud en la zona. Actualmente ambas unidades están en Ciudad del Carmen -desde que inició la contingencia sanitaria- a fin de apoyar a la población y a los servicios públicos de salud. Lo bueno suma.

Oaxaca, fascismo alimentario

La economía de Oaxaca, que habría mostrado una gran resilencia en la actual recesión económica, acaba de recibir un golpe mortal y que amaga con extenderse a todo el país: la mayoría de Morena en el congreso local y que encabeza Irineo Molina doblegó al gobernador Alejandro Murat e impuso la llamada “Ley Antichatarra” con que se criminaliza la venta de alimentos y bebidas procesadas con “alto contenido calórico” a menores de edad cómo si fueran cigarros o alcohol. Tras su aprobación, el subsecretario Hugo López Gatell aplaudió a rabiar la prohibición. Hay que ser ciegos para no inferir que, al igual que sucedió con la “Ley Bonilla” en Baja California, esta medida se busca replicar en todo el país. En Oaxaca, de inmediato, es factible quiebren la mitad del pequeño comercio y de la industria artesanal de dulces y confites, así como el florecimiento del mercado negro de estos productos. Y es que, demostrado está, la obesidad se combate con educación, no con prohibiciones.

mflores37@yahoo.es

@mfloresarellano