Pese a todos los esfuerzos que hizo Morena para atacar, descalificar y poner “piedritas y piedrotas” en el camino a la Alianza “Va por México”, que conforman PRI, PAN y PRD, hoy será un día muy importante para este bloque opositor porque anunciarán que van juntos en las elecciones de Coahuila y el Estado de México y con esto, sin duda aprovechan las serias divisiones que se han registrado en el partido oficial, especialmente en el caso coahuilense, porque está visto que el subsecretario de Seguridad a nivel federal, Ricardo Mejía Berdeja, no ha “quitado el dedo del renglón” y está dispuesto a jugarse el todo por el todo con tal de que el senador Armando Guadiana, en algún momento, renuncie a la candidatura morenista al gobierno de dicho estado. ¿Lo logrará?
De manera previa, los dirigentes de dichos institutos políticos: Alejandro Moreno Cárdenas, Marko Cortés y Jesús Zambrano, se reunieron ayer para afinar los últimos detalles de dicha alianza, que representa un serio peligro para esta errada y llamada cuarta transformación. Incluso, el propio inquilino de Palacio Nacional, -según se sabe-, orquestó esta guerra en contra de la oposición que le vino a dar un serio revés cuando le demostró que no tiene el control absoluto del Congreso de la Unión, como él tanto lo desea.
El Ejecutivo también ve amenazados otros de sus anhelos porque la racha ganadora que trae esta errada y llamada cuarta transformación y su partido Morena, podría verse frustrada en los comicios de este aún naciente año.
Y más frustración para el tabasqueño porque nunca pudo deshacer al bloque opositor, así como también lo ha intentado con los organismos autónomos y en este sentido, debería de tener en cuenta un factor sumamente importante, el voto de los arrepentidos y los desencantados.
Habrá que ver con qué estrategia se va ahora el inquilino de Palacio Nacional, porque es obvio que no cejará en sus vehementes intentos por destruir a la oposición y tampoco hay que soslayar otro revés que sufriera el tabasqueño con la elección en la Suprema Corte de Justicia de la ministra Norma Lucía Piña, que se convirtió así en la primera mujer en ser cabeza del máximo tribunal de justicia. Esto, por aquello de que el tabasqueño insiste en sacar adelante su famoso Plan “B” de la Reforma Electoral.
MUNICIONES
*** No ha pasado mucho tiempo desde que el presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado de la República, Ricardo Monreal Avila, se refirió a una famosa canción de José Alfredo Jiménez en aquella frase de, “diciembre me gustó pa’ que te vayas”, por eso de que el legislador zacatecano podría migrar a otro partido para ser candidato presidencial, luego de los desaires que le ha hecho López Obrador y su “corcholata” consentida, la jefa de Gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum. Pues bien, ayer de manera textual, el senador Monreal respondió: “diciembre se acabó y no he cambiado de opinión, sigo en mi sueño y en mi lucha real de estar en las boletas en el 2024, ya que, -dijo-, México necesita de un conductor, un líder, un presidente que pueda llevar al país hacia mejores niveles de desarrollo, hacia una reconciliación nacional”. Remató diciendo “quiero ganar a la buena”.
*** Cuando no el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar le enmienda la plana ni más ni menos que al presidente López Obrador, es el tabasqueño el que lo hace. El problema es que esto se está volviendo un círculo vicioso, que podría afectar aún más la relación bilateral, con todo y la reciente reunión de los Líderes de América del Norte, encuentro en el que, -como se ha consignado en este espacio en anterior entrega-, el mandatario mexicano se vio muy menor, pese a su lema de “los tres amigos”. El caso es que el embajador Salazar informó que el gobierno de su país y el de México, trabajan de manera conjunta para que se den más extradiciones de narcotraficantes mexicanos a Estados Unidos y que ambas naciones están en un momento de gran oportunidad como producto de la mirada del presidente Joe Biden, que se dirige ahora hacia el sur, situación que no había ocurrido desde hace nueve años. Llamó la atención que el diplomático norteamericano no se hubiera referido al caso de la detención de Ovidio Guzmán porque es bien sabido que ésta fue una solicitud del propio mandatario estadunidense y se reitera que mucho se especula que el de Tepetitán, supuestamente habría traicionado al cartel de Sinaloa. ¿Será?
*** El coordinador del Grupo Parlamentario del PRD en el Congreso de la Ciudad de México, Víctor Hugo Lobo Román, denunció al titular de la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco) de la CDMX, Fadlala Akabani Hneide, por favorecer a las alcaldías gobernadas por Morena y, por el contrario, perjudicar a las demarcaciones que encabeza la oposición a la hora de destinar recursos del programa para mejorar los mercados públicos. Ante ello, en un punto de acuerdo, que presentó a la Comisión Permanente del Congreso capitalino, el legislador pidió que la Sedeco presente un informe pormenorizado sobre los criterios utilizados para rechazar proyectos de inversión presentados por las alcaldías de la oposición, para ser beneficiadas en el programa “Acción Institucional Para el Fomento y Mejoramiento de los Mercados Públicos de la Ciudad de México”. De igual forma, LOBO Román, pidió al Legislativo local, exija al titular de dicha dependencia envié informe sobre el número de proyectos presentados por cada alcaldía, cuántos fueron rechazados y cuántos aceptados. Al hacer el planteamiento, recordó que en la capital existen 329 mercados públicos con más de 72 mil locales, distribuidos en las 16 alcaldías, mismos que generan aproximadamente 280 mil fuentes de empleo y aportan el 1.7% del PIB comercial de la Ciudad de México.
*** En la cena que el presidente López Obrador ofreció a sus dos amigos, Joe Biden y Justin Trudeau en Palacio Nacional, consistió en una entrada de tortilla inflada con aguacate y queso fresco, luego se sirvió sopa de milpa con elote tierno, flor de calabaza y rajas de chile poblano y como plato fuerte había varias opciones: pescado con salsa de flor de calabaza; arroz con chipilín o bien, filete de res acompañado con calabaza criolla. En cuanto a las bebidas, hubo agua de mandarina con miel, café y vinos mexicanos. El postre consistió en tamales rellenos de chocolate y guayaba.